La propuesta narra la travesía de Greta en un mundo paralelo entre los vivos y los muertos. En la historia, pasamos de un espacio real, un cuarto de hospital, a un mundo fantástico conformado por un bosque, un laberinto y finalmente un cementerio.
Se trata del montaje operístico más reciente del Festival de Bregenz (Austria), cuya majestuosa producción, colocada sobre el mayor escenario flotante del mundo, podrá ser vista a través de una proyección en alta definición en la Sala Carlos Monsiváis.