Con actividades lúdicas abordan la historia de la mujer coreana
ï‚· Los talleres se llevarán a cabo los sábados 2, 9, 16, 23 y 30 de abril
Con actividades lúdicas y educativas se darán a conocer aspectos históricos, sociales
y culturales de la mujer coreana, a través de la historia. Las sesiones se llevarán a
cabo en Museo Nacional de las Culturas, del Instituto Nacional de Antropología e
Historia, los sábados 2, 9, 16, 23 y 30 de abril, de 12:00 a 14:00 horas.
Los talleres sabatinos acompañarán al ciclo de conferencias La mujer en
Corea, que se realizarán los jueves de abril, a las 17:00 horas, en la Sala Polivalente.
En el taller Los secretos del anbang, que se efectuará los sábados 2 y 16 de
abril, los asistentes realizarán una visita a la Sala permanente de Corea, donde
conocerán un anbang o habitación principal femenina, así como la vida de las damas
de la élite coreana que se restringía al hogar; después elaborarán un pequeño
biombo.
Durante la dinastía Joseon (1392-1910), la habitación femenina principal,
estaba acondicionada a las necesidades y al gusto de su ocupante con diversos
muebles de finas maderas: cómodas apilables para guardar prendas, estantes donde
colocar objetos preciados y estuches con incrustaciones de concha nácar para
cosméticos y artículos de costura.
Los muebles coreanos se caracterizan por su sencillez y por resaltar las vetas
de las maderas principalmente de pino, paulonia, arce o zelkova. Su diseño busca la
armonía con la naturaleza, la arquitectura tradicional y el limitado espacio de las
habitaciones.
Los sábados 9 y 23 de marzo se impartirá el taller Cascabelero, donde los
participantes conocerán una de las tradiciones coreanas más importantes y antiguas:
el chamanismo. Los cascabeles son instrumentos que utilizan los chamanes coreanos
para invocar a los dioses, pero también eran símbolos de autoridad.
Mudang es el vocablo que se utiliza en Corea para referirse a los chamanes,
estos pueden ser hombres o mujeres, aunque actualmente son más féminas.
El chamanismo, comentó Monserrat Navarro, jefa de Comunicación Educativa,
es la religión autóctona de Corea, fue la primera en practicarse y no está extinta, los
chamanes siguen vigentes y simbolizan autoridad. Los cascabeles que utilizan en sus rituales sirven para contactar a los dioses, así como nosotros utilizamos objetos como
puede ser una veladora, una danza o una oración.
“El objetivo de este taller es replantear la idea errónea que se tiene del
chamanismo, pues se piensa que son brujos, pero sólo son personas con un
conocimiento distinto que incluye una comunicación con los dioses, con el medio que
les rodea, y la comprensión del ser humano”, dijo Monserrat Navarro.
El mudang es intermediario entre espíritus, dioses y seres humanos con la
intención de ayudar a solucionar problemas, establece comunicación entre dos
mundos, el cielo y la tierra, a través de ritos que son acompañados de música y baile.
El 30 de marzo se realizará el taller Hollyebok para una boda. Durante la sesión
se darán a conocer algunas tradiciones y ritos matrimoniales de esta singular cultura,
y los asistentes podrán elaborar una muñeca y la vestirán de novia.
En Corea el casamiento es el acontecimiento familiar más importante. Por ello,
la vestimenta de los desposados es confeccionada con refinados materiales. La novia
es conducida al lugar de la ceremonia con el rostro cubierto por un velo y debe
mantener los ojos cerrados. Por esa razón, se le pone en los párpados cera de abeja
con aceite de ajonjolí.
Las nupcias tradicionales constan de tres ritos principales, uno de ellos es
Reverencias mutuas, donde el novio se coloca al este de la mesa-altar y la novia al
oeste. El brindis es el momento en que los novios comparten tres cuencos de vino,
con uno brindan por ellos y con los otros dos por su armonía como pareja.
Las ofrendas son el tercer ritual, en el cual la novia obsequia a su suegro
dátiles y castañas envueltos en una tela roja; él le regresa una parte deseándole que
tenga muchos hijos varones. A su suegra le ofrece alimentos envueltos en una tela
azul; mientras los saborea, ella le aconseja cómo mantener buenas relaciones con la
familia.
En la mesa-altar se colocan ramas de bambú y hojas de pino que, como las
castañas, simbolizan castidad, rectitud y larga vida. Los dátiles representan fertilidad y
continuidad del linaje; los pastelillos de arroz abundancia y armonía. También se
agregan alubias blancas y rojas para alejar la mala suerte.
Antes de la boda, el novio regalaba a su suegra un ganso vivo como prueba de
fidelidad, debido a que esta ave tiene una sola pareja durante toda su vida. En señal
de aprobación del matrimonio, la suegra le daba al animal largos tallarines. Con el paso del tiempo, ese obsequio se sustituyó por un par de gansos o patos de madera,
símbolos de armonía y felicidad conyugal.
Los talleres se llevarán a cabo los sábados 2, 9, 16, 23 y 30 de abril, de 12:00 a
14:00 horas, en el Museo Nacional de las Culturas, que se ubica en Moneda 13,
Centro Histórico, a una cuadra del Metro Zócalo. Más información
talleresmnc@gmail.com y al 5542-0422 /1097/ 0165 ext. 116.