Alrededor de 300 mil personas visitaron la exposición Leonardo da Vinci y la idea de la belleza





Cada 30 minutos ingresaron 210 personas al Museo del Palacio de Bellas Artes



Durante los días del maratón, que inició el pasado viernes a las 8:00 y concluyó este lunes a las 8:00 horas, las exposiciones recibieron 35 mil 717 visitantes



Miguel Ángel Buonarroti. Un artista entre dos mundos, permanecerá abierta hasta el 27 de septiembre





Alrededor de 300 mil personas visitaron la exposición Leonardo da Vinci y la idea de belleza, que este lunes concluyó en el Museo del Palacio de Bellas Artes.



Durante los días del maratón, que inició el pasado viernes a las 8:00 y concluyó este lunes a las 8:00 horas, las exposiciones recibieron 35 mil 717 visitantes.



El recinto del Instituto Nacional de Bellas Artes recibió cada 30 minutos 210 visitantes, quienes de manera ordenada entraron a las salas de exhibición, donde en todo momento se veló por la seguridad de la obra expuesta, procurando evitar exceso de personas que pudiera ponerla en riesgo.



Ambas exposiciones lograron esta cifra de asistencia en 60 días de exhibición, en comparación con otras exposiciones exitosas como Yayoi Kusama, obsesión infinita, que tuvo 330 mil visitantes en 146 días.



En entrevista, el director del MPBA, Miguel Fernández Félix, dijo que la mayor parte de la gente que acudió en estos dos meses a la exposición del genio italiano fue joven, lo cual significa que “la juventud mexicana quiere y le interesa la cultura”.



Señaló que, más allá de las cifras, lo que le interesa al Conaculta y al INBA es atender a todos los públicos con el fin de enriquecer sus experiencias. Si las cifras rompen récords o no, qué bueno, pero no es nuestro interés, queremos que el público salga contento de cada muestra de arte que le presentamos, aclaró.



Luego de instar a la gente a visitar la muestra de Miguel Ángel Buonarroti. Un artista entre dos mundos, que estará abierta hasta el 27 de septiembre en el mismo sitio, el funcionario informó que los comisarios italianos de la Biblioteca Real de Turín ya se encuentran en México para desmontar la muestra de Leonardo da Vinci.



Indicó que ellos trabajan conjuntamente con personal del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (Cencropam) del INBA “para hacer todo el protocolo correspondiente para el regreso de las obras a su lugar de origen”.



Apuntó que la gente de la Biblioteca Real de Turín se encuentra muy contenta y feliz por las miles de personas que visitaron la muestra de Leonardo en México.



“Les habíamos pedido que nos dieran un poquito más de tiempo para extender la exposición de Leonardo, pero entendimos que no fue posible, debido a las condiciones del papel y a que la exposición venía de otro lugar. Fue muy complicado que estuviese más tiempo. Esperamos que sigamos haciendo proyectos con Italia”.



Las últimas personas que se encontraban en la fila para entrar al MPBA denotaban felicidad. Entre ellas, Eduardo Ramos de 47 años, quien acudió con su madre, Soledad Camacho de 69 años. Provenientes de Cuautitlán Izcalli, Estado de México, desde las 6 de la mañana ya estaban listos para partir a su gran aventura cultural.



A los dos, dijo Ramos, nos atrae conocer la obra de Leonardo da Vinci. Nos interesó venir porque no la ves cotidianamente en México, dijo.



Andrea y Fabián también estaban en la fila este lunes a las 6 de la mañana, joven pareja que también se dio tiempo para darle el adiós a la muestra de Leonardo. Ambos son vendedores y llegaron de Tláhuac. Me gusta Leonardo porque dio un gran aporte a la humanidad desde astronomía hasta la pintura; fue multifacético, afirmó la joven. De igual manera piensa él, quien dijo que siempre le ha llamado la atención la inventiva de Leonardo.



Otro caso fue el de la maestra Isolda López Andrade de 62 años, quien vino desde Coyoacán para despedir a Leonardo da Vinci. Me siento agradecida de que el INBA haya traído a México la exposición de Leonardo, señaló, luego de adquirir algunos souvenirs con imágenes de los dibujos del artista florentino.



Señaló que el boleto no se le hizo caro “para lo que vi. Tanto Miguel Ángel como Leonardo me dieron un sentimiento de emoción. Se me enchinó el cuerpo de ver esa belleza que no veo en los artistas de ahora. Las personas de hoy no tenemos tiempo de observar y analizar la belleza que nos rodea”, aseguró.



Desde Tecámac, Karla “N” de 10 años fue con su madre al Palacio de Bellas Artes. Se levantaron muy temprano para despedir a uno de sus personajes favoritos que sólo conocía a través de los libros de texto. Su experiencia nunca la va a olvidar.



La señora Esperanza Reyes de 48 años fue con su padre Marco Antonio Reyes de 81 años. A éste el bastón no le impidió admirar la obra de Leonardo. Ellos fueron los últimos en entrar al recinto de mármol, antes de que se cerrarán sus puertas a las 8:35 horas.



Hasta el último momento, cientos de personas se dieron tiempo para acudir a una muestra que, desde el primer momento, despertó la curiosidad del público mexicano. Aún no daban las ocho de la mañana y el frío estaba en su apogeo. Pero ello no intimó a la gente para admirar a los dos genios renacentistas.



Después de la visitar la muestra, muchos tendrían que ir a sus trabajos o a la escuela. Había muchos niños menores de diez años y fue notoria la presencia de una mujer joven, quien con férula en una pierna no perdió en ningún momento el ánimo.



Solos o acompañados de familiares y amigos, las personas no sentían el cansancio sino la alegría. Algunos aprovecharon para comprar los catálogos de ambas muestras, botones, o la guía, con tal de conservar un recuerdo de este fenómeno cultural.





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