Daniel Hourdé en el Museo de la Cancillería (04-05)
Daniel Hourdé nacido en Boulogne Billancourt, Francia, en 1947, inició como galerista y pintor. Hourdé estudió pintura y dibujo en École des Beaux-Arts de Grenoble y París, y se consagró a partir de los años ochenta esencialmente a la escultura, trabajó en la técnica y los materiales tradicionales como el bronce, las vanitas –género artístico que resalta la vacuidad de la vida y la relevancia de la muerte como fin de los placeres mundanos–, y en el realismo en el que encontró la mejor manera de dar cuerpo y alma a sus personajes.
Sus motivos recurrentes son: los esqueletos, la Cruz y la corona de espinas, la Caída y la Redención, los depositarios de las danzas de la muerte de la Edad Media o el visionario retablo de Issenheim