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Comparte Bernardo Esquinca su kit de sobrevivencia literaria durante el Gran Remate de Libros en el Auditorio Nacional

Comparte Bernardo Esquinca su kit de sobrevivencia literaria durante el Gran Remate de Libros en el Auditorio Nacional



· El escritor de novela negra compartió con el público los títulos de sus textos y autores favoritos de terror y otros géneros oscuros, entre los que destacan Edgar Allan Poe y Raymond Chandler



· Durante la tarde del miércoles, segundo día de Remate, el público pudo disfrutar de amenas charlas y narraciones orales, así como de un concierto de música flamenca con el guitarrista Damián Marrún



El escritor de novela negra Bernardo Esquinca compartió en el segundo día del 11º Gran Remate de Libros en el Auditorio Nacional, que se lleva cabo hasta el 18 de abril, sus libros y autores favoritos del género de terror, policiaco, fantástico y ciencia ficción, a través de la charla titulada “Kit de supervivencia literaria”.



“El libro y la lectura cumplen un papel realmente de supervivencia, nos nutren de conocimiento. La novela policiaca, en particular, es ideal para entender cómo se dan los vínculos entre el poder, el crimen y la corrupción”, destacó Esquinca al inicio de la charla en el Foro Sergio González Rodríguez.



A través de este interesante ejercicio literario —que pide a los escritores su lista infalible de libros que desearían tener consigo en una isla desierta—, el autor de la novela titulada “Toda la sangre” (2013), enfatizó que su lista estaría encabezada por los cuentos del escritor, poeta y periodista estadounidense Edgar Allan Poe (1809-1849).



“Poe es uno de los iniciadores del relato policial, recordemos su cuento Los crímenes de la calle Morgue”, destacó Esquinca al crear un ambiente de suspenso y terror tras nombrar a otros autores como Raymond Chandler (1888-1959), H.P. Lovecraft (1890-1937), Rafael Bernal (1915-1972), Ray Bradbury (1920-2012), Amparo Dávila (1928) y Stephen King (1947), por mencionar algunos.



“Hay un autor estadounidense que a mí me gusta mucho y se llama James Ellroy (1948), estoy seguro que algunos de sus libros deben estar por aquí, es uno de los narradores de novela negra más importantes en el mundo y lo que hace es una mezcla muy interesante de novela policiaca con novela histórica”, compartió el escritor guanajuatense a un público de todas las edades reunido para escucharlo.



A petición del público sobre opciones para incrementar la lista de su kit literario, el autor añadió el nombre de algunos poetas que han escrito textos similares, como José Emilio Pacheco (1939-2014) y Amado Nervo (1870-1919). Y celebró la gran oportunidad que significa esta fiesta de las letras para la vida de los libros y de los lectores.



“Es indispensable darle una segunda oportunidad a los libros; muchas veces no se venden porque el camino que tiene que emprender un libro para llegar al lector ideal —que son todos ustedes—, no siempre es fácil”, expresó.



Añadió que en muchas ocasiones sucede que un futuro lector no se entera de que existe un libro que podría encantarle. “Muchas editoriales invierten en publicar un libro, pero a veces ya no se puede invertir tanto en su promoción, entonces no se cierra ese ciclo para que el libro llegue al conocimiento del lector y éste, a su vez, lo quiera en sus manos”, concluyó Esquinca.



Un atardecer literario y flamenco



Rumbo al cierre del segundo día del Gran Remate de Libros, el escenario principal de actividades, el Foro Sergio González Rodríguez, recibió a la escritora Brenda Lozano y al músico y conductor de radio Willy Damage, con la charla titulada “Un palomazo: Música y literatura”.



En el espacio ubicado en la planta baja del vestíbulo del Auditorio Nacional, los artistas dialogaron sobre los estereotipos, formas de trabajo y narrativas que implican la creación musical y literaria. De acuerdo con la autora de la novela Todo o nada, la narrativa de la que se nutre se encuentra en todo lo que le sucede, hasta el lenguaje que utiliza para comunicarse.



“Hay esta idea de que un escritor está en la punta de la torre con su pluma de ganso en el silencio absoluto, y la verdad es que no es así, pasan los tamales oaxaqueños, suena el teléfono, vibra el celular, en fin, está lleno de ruidos, aunque pareciera que no hay música, pero la narrativa es el material del que está hecha nuestra vida diaria”, compartió Brenda Lozano.



Willy Damage, ex integrante de Lost Acapulco, explicó que el trabajo colectivo es más gratificante en la composición musical, mientras que en la creación de la letra de una canción la rutina suele ser una escritura individual.



Además de compartir algunos de sus gustos musicales y literarios, los invitados dieron las gracias al público visitante por acudir a estos eventos que los acercan a las letras, mensaje con el que dieron fin a su plática y cedieron el micrófono al guitarrista Damián Marrún, quien con un concierto cerró las actividades.



“Estas presentaciones musicales nos despiertan el lado artístico que todos tenemos, nos ayudan mucho a trabajar la sensibilidad para abrir nuestra apreciación a la literatura”, señaló en entrevista Marrún, quien ofreció un concierto de música flamenca.



Considerado por el artista como un rescate cultural, el repertorio —que provocó calurosos aplausos del público—, estuvo integrado por piezas como “La guajira”, de Paco de Lucía, y “Asturias”, de Isaac Albéniz, en las que estuvo acompañado por el guitarrista Fernando Garrido; así como “Amanecer árabe”, “Herencia latina” y “En las cuevas”, de Francisco Peña —en esta última pieza acompañado del guitarrista y empresario Jacobo Zaga—.



Los niños y las letras



En el Espacio de Promotores Culturales, Zona de Talleres y el Centro de Lectura Juan Bañuelos, niños, niñas y público joven pudieron encontrar diversas actividades que disfrutaron acompañados de su familia, ofrecidas por el proyecto Inventores Culturales, fomento a la lectura en espacios públicos, del área de Fomento Cultural Infantil de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.



“Este encuentro es un espacio donde se pueden encontrar libros infantiles y juveniles a un precio de remate, los padres pueden adquirir a bajos costos libros bien hechos, buenos títulos y buenas editoriales; pero también los niños pueden disfrutar del acervo infantil que llevamos itinerante por la ciudad, títulos para diferentes edades”, explicó en entrevista María Concepción Cuevas, responsable del área.



En voz de la cuenta cuentos Nayma Fernández Pérez, del Colectivo Yoliliztlatolli, niñas y niños que asistieron al segundo día de este Gran Remate de Libros, revivieron historias clásicas como “Alicia en el país de las maravillas”, y cuentos breves como Niña bonita, de la escritora brasileña Ana María Machado.



Desde las 17:00 horas, en el Centro de Lectura Juan Bañuelos, también pudo escucharse Charlie en la fábrica de Chocolate, una historia que hizo reír a grandes y chicos de principio a fin. Asimismo, decenas de niños y adultos escucharon algunos relatos infantiles que captaron su atención, en la actividad titulada “Llévele, llévele cuentos de remate”.



El 11° Gran Remate de Libros se lleva a cabo con la participación de 250 expositores y más de 700 sellos editoriales, hasta el 18 de abril, de 11:00 a 19:00 horas, en el Auditorio Nacional, ubicado en Paseo de la Reforma 50, I Sección del Bosque de Chapultepec, delegación Miguel Hidalgo. La entrada es libre.