Se aproxima 14 de febrero y con él las diversas alternativas para pasar un fin de semana en compañía de los amigos o en pareja, muchos son los destinos tradicionales que van desde las típicas playas hasta los sitios de cabaña, generalmente ambas opciones están muy saturadas debido a la euforia de la celebración, provocando una sensación citadina que no permite descansar al viajero