Para la fotógrafa oaxaqueña Rosalba Bustamante, el factor sorpresa y el romanticismo de una imagen estenopeica fue lo que la enamoró de esta técnica, que aunque parezca arcaica en la era digital, está más viva que nunca, asegura la experta.
Rosalba es de formación traumatóloga ortopedista, titulada en Guadalajara, sin embargo, luego de año y medio de ejercer, decidió explorar el camino del arte, primero el canto y las percusiones, luego una cámara “para hacer lo que realmente me hace muy feliz y disfruto desde hace 10 años, porque comprobé que para mí el arte es una catarsis”, comenta en entrevista.