Glenfiddich, el Single Malt más premiado del mundo, se mantiene a la vanguardia, y una vez más desafía lo convencional para convertirse en el centro de las celebraciones en todo el mundo con su nueva variante: Grand Cru, madurado durante 23 años en raras barricas de roble francés cuvée para fusionar los mejores sabores de Escocia y Francia y con ello crear un líquido que se convierte en expresión de lujo y digno para compartir.