La Orquesta Sinfónica del Estado de México celebrará su 45º aniversario con un concierto en el Palacio de Bellas Artes
La agrupación dirigida por Enrique Bátiz interpretará obras de Prokofiev, Verdi, Bruch y Ravel
El sábado 21 de mayo a las 19:00 en la Sala Principal del recinto de mármol
Participará la violinista lituana Dalia Kuznekovaite como solista invitada
La Orquesta Sinfónica del Estado de México (OSEM), dirigida por Enrique Bátiz, celebrará su 45º aniversario con un concierto que se realizará el sábado 21 de mayo a las 19:00 en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.
Acompañada por la violinista lituana Dalia Kuznekovaite, la OSEM interpretará la Sinfonía núm. 1 op. 25, Clásica de Serguei Prokofiev, el Concierto núm. 1 en sol menor op. 26 de Max Bruch, la Obertura de La fuerza del destino de Giuseppe Verdi y el extracto sinfónico de la Suite de Daphnis y Cloe y el Bolero de Maurice Ravel.
A lo largo de 45 años de arduo trabajo, y con el objetivo de difundir la música como medio de unión e identificación entre los mexicanos, la OSEM ha logrado posicionarse como una de las agrupaciones más prestigiadas de Latinoamérica. Ha llevado su oferta cultural a diversas ciudades de la República Mexicana y el extranjero por medio de conciertos con algunos de los más destacados directores y solistas invitados del mundo.
La OSEM ha puesto en alto el nombre de México en la República Popular de China, donde ha realizado ya dos giras, y en Estados Unidos, donde de enero a marzo de 2015 ofreció 42 conciertos.
Fue invitada a participar en la misa que el Papa Francisco ofreció el pasado 14 de febrero en el municipio de Ecatepec.
Durante nueve lustros, la OSEM ha tenido un importante papel en el impulso de nuevos talentos, a través del Concurso Internacional de Violín Henryk Szeryng.
Asimismo, fomenta nuevas creaciones y da a conocer al público obras que no han llegado aún al repertorio habitual, con lo que se fortalece como un referente y digno representante no solo del Estado de México, sino de todo el país.
La trayectoria artística del pianista y director de orquesta Enrique Bátiz Campbell (Ciudad de México, 1942) es similar. Estudió en The Juilliard School de Estados Unidos y en Polonia. Se inició en la ejecución del piano a los cuatro años de edad y como director en 1969, al frente de la Orquesta Sinfónica de Xalapa. A partir de ahí, su carrera ha ido en ascenso.
Señaló el crítico Aldo Fulcanelli: “Formado a la manera del rigor y del estudio permanente, Bátiz es fundador de la OSEM, con la cual ha recorrido el país y realizado giras en el extranjero”.
Del mismo modo, agregó, Bátiz cuenta con más de un centenar de grabaciones con notables orquestas del mundo, como la Filarmónica de Londres, la Real Filarmónica de Liverpool y la de la Toscana de Florencia, de composiciones de Debussy, Villa-Lobos, Saint-Saëns y Stravinski que “han sido consideradas como de las mejores del mundo y recibido importantísimos reconocimientos y menciones”.
Ganó los premios International Gold Mercury a la mejor grabación, de la revista Gramophone; Sor Juana Inés de la Cruz, y la Medalla Mozart, entre otros. También ha sido director huésped de más de 500 orquestas alrededor del mundo, con las que ha obtenido elogios de la crítica.
Luego de haber grabado las nueve sinfonías de Beethoven, “Enrique Bátiz es un artista en plenitud de facultades y vivencias (…) Su equilibrio frente a la OSEM encuentra un símil en su actitud frente a la propia vida. Situado más allá del bien y el mal, el maestro Bátiz ha sorteado toda clase de obstáculos, logrando construir una trayectoria envidiable y brillante”, aseguró Fulcanelli.
“Ver dirigir a Bátiz es un gran regalo, ya que es un hombre que se para con elegancia y corrección frente a la orquesta; sin pretensiones. Ante los músicos que integran la OSEM, se comporta con la exigencia que amerita un artista con su talento, pero, además, busca día con día consolidar lo que muchos califican como el proyecto musical de su vida. Hoy, Enrique Bátiz es un hombre que se sabe trascendente, digno alumno, fiel maestro y virtuoso director”, comentó finalmente el crítico.
Dalia Kuznecovaite nació el 11 de octubre de 1988 en Vilna, Lituania, y comenzó a tocar el violín a los cuatro años de edad. Posteriormente estudió en el Conservatorio Nacional Superior de París.
Ha ganado numerosos concursos internacionales, entre ellos el Gran Premio 2007 en el Kloster Schöntal de Alemania; el J. Brahms 2008 en Pörtschach, Austria, donde también obtuvo un premio especial de la Academia Mozart, y el primer premio y medalla de oro en el Henryk Szeryng, celebrado en la ciudad de Toluca.
En 2009, por su trayectoria, le fue concedido un premio honorífico por el entonces presidente de la República de Lituania, Valdas Adamkus.
Como solista ofrece conciertos tanto en Europa como en América, con las orquestas Deutsche Radio Philharmonie, Norddeutsche Philharmonie Rostock, Sinfónica Kärtner y Filarmónica de Kiev, por citar algunas.
Kuznecovaite toca con un violín Bernardel que pertenece a la fundación Vatelot-Rampal de París.