Regresará El cascanueces al Auditorio Nacional, a cargo de la Compañía Nacional de Danza



Ø La agrupación del INBA ofrecerá la 35ª temporada del tradicional ballet y la 15ª en la sede de Paseo de la Reforma, del 17 al 20 de diciembre



Ø Participarán la Orquesta del Teatro de Bellas Artes y alumnos de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea





El cascanueces, a cargo de la Compañía Nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), llegará a su 35ª temporada y a la 15ª en el Auditorio Nacional, donde ha sido galardonado con tres Lunas del Auditorio, en 2009, 2012 y 2013. El tradicional espectáculo dancístico y musical navideño será llevado a escena el jueves 17 de diciembre a las 20:00, y el viernes 18, el sábado 19 y el domingo 20 a las 17:00 y 20:00.




El ballet está basado en el cuento El cascanueces y el rey de los ratones, escrito en alemán en 1816 por Ernst Theodor Amadeus Hoffmann y posteriormente adaptado al francés por Alexandre Dumas. En 1891, el coreógrafo francés Marius Petipa propuso al compositor ruso Piotr Ilich Chaikovski realizar un proyecto para adaptar el cuento al lenguaje del ballet. De esta manera, con libreto de Petipa, coreografía de Lev Ivanov y música de Chaikovski, se estrenó en diciembre de 1892 en el Teatro Mariinski de San Petersburgo.




La obra forma parte del repertorio de la Compañía Nacional de Danza desde 1980, cuando la presentó por primera vez en el Auditorio Luis Elizondo de Monterrey. En la Ciudad de México fue estrenada en el Palacio de Bellas Artes el 2 de diciembre de 1980, y desde entonces cada año es escenificada por la agrupación actualmente dirigida por Laura Morelos.




En el montaje de la Compañía Nacional de Danza, la coreografía es de Nina Novak, basada en la original de Ivanov, y participarán la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, bajo la batuta del maestro Srba Dinic, y alumnos de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea del INBA. Los arreglos coreográficos estuvieron a cargo de Laura Echevarría, Carlos López, Jorge Cano y Dariusz Blajer; el diseño de escenografía, de Laura Rode; el de vestuario, de Carlo Demichelis, y el de iluminación, de Juan Luna.




“El ser humano es de costumbres, y el ballet de El cascanueces es un gran acierto en este sentido, porque en el siglo en el que fue creado se pudieron dar todas las cosas para hacer un ballet navideño: se juntaron dos grandes genios (Petipa y Chaikovski), y las estrellas principales son el árbol de Navidad y El cascanueces, un pequeño muñeco de madera utilizado para romper nueces”, comentó en entrevista el maestro Carlos López.




Explicó que se trata de una obra que ha sido adoptada por diversas compañías del mundo, como la Ópera de París y el Teatro Bolshói de Moscú. “Se ha presentado en Moscú, San Petersburgo, París, Madrid, Nueva York y Houston, entre otras ciudades del mundo, y se ha consolidado porque la música que la acompaña es maravillosa, tanto para bailar, como para escuchar”.



Destacó que en su estreno la obra no gustó mucho, pero posteriormente se realizó una serie de arreglos para llegar a la versión de Nina Novak, a la que también se le hicieron ciertas modificaciones para que fuera interpretada por la Compañía Nacional de Danza: “Es la coreografía original de Nina Novak, pero con algunos arreglos. Particularmente yo incluí la participación de niños de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea, y los hice actuar en una parte muy importante de la obra: la batalla. En términos generales, el ballet siempre se presenta igual, aunque con algunos retoques.




“El cascanueces es un collage de coreógrafos que hemos estado en la Compañía, pero ahora es una obra estable y no se modifica. Es un espectáculo muy específico, con la Danza de las flautas, la Danza rusa y la Danza china. En este ballet todo tiene una razón de ser, y se ha hecho muy popular por la Navidad; es muy adecuado para diciembre. En un principio se presentaba en el Palacio de Bellas Artes, con cerca de 25 funciones al año, y ante el éxito obtenido se trasladó al Auditorio Nacional”.




Rememoró que en su juventud encarnó uno de los roles centrales de esta célebre obra coreográfica: “Tuve la oportunidad de interpretar al Caballero, quien baila al lado del Hada de azúcar, así como la Danza rusa, en diferentes compañías. Regresé a México con más de 30 años de edad y ya no pude bailarlo, aunque sí hice el dueto principal en programas de concierto”.




Como parte de la 35ª temporada de El cascanueces, la Compañía Nacional de Danza llevará a cabo la Danza de los juguetes, en la cual se invita a todos los asistentes a participar con la donación de juguetes nuevos que no sean bélicos y que no requieran baterías, para que sean entregados en esta Navidad a niños de escasos recursos.




En cada una de las funciones habrá un contenedor donde el público podrá depositar sus regalos, los cuales serán debidamente registrados y se les dará seguimiento desde el momento de la recepción hasta su entrega a organizaciones que benefician a menores en situaciones vulnerables.