Presentarán Cuaderno de Borneo

del poeta Francisco Hernández





Ø Primera vez que se publica este libro de manera individual



Ø Martes 13 de octubre a las 19:00, en la sala Manuel M. Ponce del PBA





El libro Cuaderno de Borneo del poeta Francisco Hernández se presentará en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, el próximo martes 13 de octubre a las 19:00, con la participación de la crítica literaria Jocelyn Martínez y el poeta Christian Peña.



Francisco Hernández ha hecho hablar en parte de su obra a otras voces que no son las de él. Así lo hizo con De cómo Robert Schumann fue vencido por los demonios (1988), Habla Scardanelli (1993), Moneda de tres caras (1994), Mal de Graves (2013), y ahora lo vuelve a hacer con Cuaderno de Borneo, en el que da voz al poeta austríaco Georg Trakl.



Una carta fechada el 24 de abril de 1912 escrita por Trakl a un amigo, le dio a Hernández el indicio para escribir este poemario que se publica por primera vez de manera individual.





“Tal vez vaya a Borneo. De algún modo se descargará la tormenta que en mí se acumula”, se lee en dicho documento. Va a ese lugar para olvidar a su hermana, con quien tuvo una relación incestuosa desde temprana edad, y también para dejar de lado esa vida de miseria que lo llevó a ser un adicto a la cocaína y al alcohol, situación que empeoró con el inicio de la Segunda Guerra Mundial y su participación en las unidades sanitarias, debido a su profesión como farmacéutico.



El miedo a morir en el campo de batalla lo motivó a suicidarse. No lo logró la primera vez que lo intentó, pero el deseo de huir de la vida antes de que ésta terminara con él, no lo dejó vivir tranquilo durante su corta existencia, pues a los 27 años tuvo una sobredosis de “caspa del diablo”, mientras estaba recluido en un manicomio, víctima de la depresión crónica que sufría.



Poesía argumental es la que cuenta una breve historia sin hacerlo de manera puramente narrativa. ¿Por qué decidió que en su obra hablen voces que no son la suya? “Fue bastante inconsciente y me lo han señalado al menos una vez como un defecto, como si no quisiera dar la cara, dar la voz y me volviera ventrílocuo. Pero a fin de cuentas es obvio que el que habla soy yo pero me apoyo en la vida más rica de otros”, explica Francisco Hernández.



En la sala de la casa del poeta hay un cuadro en el que se lee “Nadie te va a extrañar en la muchedumbre”, hecho con recortes de letras de periódico. Para él, esta frase puede resumir la actitud ante la vida de tres de los personajes de los que ha escrito en su obra: el músico Robert Schumann y los poetas Friedrich Hölderlin y Georg Trakl. “O sea, vas a pasar por aquí y adiós. Creo que esa sensación la tenían muy clara estos escritores, están aquí haciendo lo que podían hacer y ya”.



¿Y sucede que a veces la vida imaginada de la persona sobre la que escribe se confunde con la suya propia? “Sí, hay similitudes en cuanto a lo que nos pasa a todos: la soledad, la depresión, el deseo de vivir en otra parte o de ser otra persona. Pues eso está ahí en cada uno de esos libros, de esos textos”.



“Borneo es un lugar extraño”, escribe en uno de los poemas de Cuaderno de Borneo Francisco Hernández. A lo largo de este libro somos testigos del andar de George Trakl en esta isla, la tercera más grande del mundo, donde “en vez de almohadas se utilizan pájaros”, “llueve casi 300 días al año”, “no hay fuentes, campanarios ni farmacias” y, además, “los habitantes de aquí solo lloran”.



No se sabe por qué fue Trakl a ese lugar; quizá no deseaba vivir en su país, quizá tenía dolor y culpa producto de la relación con su hermana, o posiblemente le producía pánico el estallido de la guerra y prefirió huir. La respuesta la tiene uno al concluir la lectura.