Arranca en la Cineteca Nacional el ciclo Tin Tan: 100 años



Un ciclo de 12 filmes dará cuenta del genio del Pachuco de Oro en su colaboración con Gilberto Martínez Solares



En el marco de su centenario esta programación se une a las actividades organizadas por su centenario



El genio entrañable de Germán Valdés Tin Tan, uno de los cómicos mexicanos más importantes de la época dorada del cine nacional, ha trascendido geografías y generaciones. Prueba de ello, es la convocatoria y el agrado que despierta la amplia oferta de eventos organizados para celebrar su figura e inmenso legado a cien años de su natalicio.

En el marco de estos homenajes al artista, nacido el 19 de septiembre de 1915 en la Ciudad de México, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) y la Cineteca Nacional han dedicado una serie de actividades que se extenderán a lo largo del año, entre ellas el ciclo “Tin Tan: 100 años”, que tendrá lugar en salas de la Cineteca Nacional a partir del 2 de octubre.

La selección de este ciclo se conforma de 12 filmes que fueron dirigidos por el cineasta mexicano Gilberto Martínez Solares y que resultan emblemáticas en la formidable trayectoria cinematográfica de Germán Valdés. Se trata de una importante muestra del valor que tiene para nuestro cine la colaboración entre el talento del cómico mexicano con la visión de Martínez Solares, considerado el director ideal para dar rienda suelta a la inventiva de Tin Tan.

Así, este ciclo arranca con la entrañable cinta Calabacitas tiernas (¡Ay qué bonitas piernas!) (1948), la primera de muchas colaboraciones entre Tin Tan y Martínez Solares. El gran humor del actor se mezcla con su talento para la música y el baile en esta historia en la que el cómico se hace pasar por un hombre de negocios en bancarrota para así evitar que lo persigan todos sus acreedores. También entre el humor no deja de hacer una de los negocios chuecos en la industria del entretenimiento de ese tiempo.

La programación se complementa con Soy charro de levita (1949), donde Tin Tan en su papel de pachuco, junto a su carnal Marcelo, participa en esta comedia de enredos en la que debe regresar a su pueblo a defender, más obligado que convencido, la honra de Carmelita, una vecina. La divertida trama de esta película se enriquece con la belleza y carisma de su protagonista Rosita Quintana.

También se incluye el célebre clásico de la comedia mexicana El rey del barrio (1949), una divertida parodia del melodrama mexicano en la que Tin Tan hace gala de su versatilidad al interpretar a un humilde ferrocarrilero que se convierte en pintor francés, en gánster de Chicago, en bailaor de flamenco y en profesor italiano de canto, sin que estos juegos queden fuera de lugar dentro del contexto de un barrio típico de la ciudad de México.

En La marca del Zorrillo (1950), German Valdés protagoniza una de sus primeras parodias de los clásicos de la literatura y el cine mientras hace atléticas acrobacias, simpáticas bromas y divertidos -y anacrónicos- números musicales. La historia se desarrolla en la California de 1840, donde el bizco vizconde de Texmelucan ofrece una fiesta para recibir a su hijo Tin, quien regresa de Italia donde estuvo estudiando esgrima.

Continúa Simbad el mareado (1950), en la que el relajado del puerto de Acapulco es el escenario ideal para esta divertida comedia de enredos en la que Tin Tan interpreta a un pícaro "bueno para nada" que intenta en vano conquistar a las bellas extranjeras que pasean por las playas.

En ¡Ay amor… cómo me has puesto! (1950), el comediante es un repartidor de pan que vive en una vecindad enamorado de Margarita, hija de un millonario. Los enredos que separan a estos enamorados permiten a Tin Tan dar rienda suelta a su genial capacidad para la improvisación y el relajo. La elegante belleza de Rebeca Iturbide es un atractivo adicional de esta simpática historia.

El personaje que interpreta Germán Valdes en El revoltoso (1950) se mete en líos a cada rato por tratar de ayudar a los demás. Una estafa lo lleva a la cárcel y su afición por meterse en lo que no le importa termina provocando que su novia Lupita sea acusada de traficante. Ante la grave acusación, Tin Tan hará todo lo que esté en sus manos para evitar que Lupita sea encarcelada.

Parodia de la popular historia de Perrault -de moda en 1951 gracias a la película animada de Disney, El ceniciento (1951), destaca por la genial mancuerna formada por el talento chispeante de Tin Tan y el magistral humor negro de don Andrés Soler.

En Chucho el remendado (1951), Valentín (Tin Tan) y Magdalena viven casados y con lujo, gracias al dinero de ella. Mientras ofrecen una fiesta, un ladrón enmascarado roba las joyas de las invitadas y luego roba las que Valentín compró para su esposa. El ladrón resulta ser el mismo Valentín, quien se ha enredado con Margot, una cantante de cabaret que lo chantajea con enterar de todo a Magdalena.

Una mezcla de las aventuras de Tarzán y el mito de King Kong es El bello durmiente (1952), una alocada comedia que desafía cualquier intento por clasificarla en un género en la que un grupo de arqueólogos encuentra en una excavación el cuerpo de Triquitrán, un hombre de las cavernas.

Se presenta además Me traes de un ala (1952) en la que Tin Tan interpreta a un periodista que busca conquistar a la bella vedette Rosita, y para ello se somete a sus caprichos. Al ser despedido junto con su amigo Narciso del periódico en que trabaja, Tin Tan intenta vender un argumento para cine. Una mujer lo busca para comprárselo y Tin Tan va a visitarla a una lóbrega mansión en la que se desata un tremendo lío.

Finalmente, se presenta El vizconde de Montecristo (1954), otra divertida parodia de clásicos literarios, en la que Tin Tan sufre con gracia, canta, baila y derrocha simpatía al dar vida a Inocencio, el mozo de un banco que está enamorado de Marga, la hija del gerente don Miguel. De nuevo, destaca la mancuerna entre el cómico y don Andrés Soler.

A la par de este ciclo la Cineteca Nacional ha programado un par de presentaciones musicales, así como charlas de especialistas coordinadas por el Departamento de Extensión Académica. A principios del próximo año se dedicará también un módulo a Tin Tan como parte de la exposición “¿Actuamos como caballeros o como lo que somos?” que revisa la historia del humor en el cine mexicano, y que será montada en La Galería de la Cineteca Nacional.

También se puede apreciar la exposición “Simplemente Tin Tan ¡Ya llegó su pachucote!” montada en los lobbies de las salas 1 y 2. La muestra reúne fotografías, lobbycards y dos videos con ediciones de las películas del actor. Además de la muestra “Reimaginando Tin Tan” con los trabajos finalistas del concurso de cartel, alusivo al comediante, convocado por la Cineteca Nacional.