La creciente conciencia del archivo ha generado importantes desarrollos y rupturas, a veces con resultados preocupantes: Gustavo Buntinx





Ø El investigador y profesor peruano participó en el simposio Archivos fuera de lugar. Circuitos expositivos, digitales y comerciales del documento



Ø La digitalización de la cultura, preámbulo de la digitalización de la naturaleza, afirmó





La creciente conciencia del archivo “ha generado importantes desarrollos y rupturas no sólo en la archivística sino incluso crucialmente en la práctica curatorial misma, a veces con resultados preocupantes, como en los extremos mistificadores que pretenden artistizar el documento, otorgándole una jerarquía de obra fetichizada en los sentidos más tradicionales del sistema modernista de jerarquías culturales”.



Lo anterior fue una aseveración del curador, historiador del arte, investigador y profesor peruano Gustavo Buntinx, quien participó en el simposio Archivos fuera de lugar. Circuitos expositivos, digitales y comerciales del documento, realizado en Ex Teresa Arte Actual.



Los mejores ejemplos de lo anterior, dijo, son las “exhibiciones exaltadas de restos dispersos, radicalmente descontextualizados de performances y acciones, asumiendo los peores términos, neutralizando el sesgo chamánico de su praxis ambivalente”.





El ex director de los museos de Arte Italiano en Lima y de Arte de San Marcos, subrayó que la actualidad del documento debe redefinirse tanto en su concepto como en su materialidad, es decir percibirlo no sólo como un instrumento referencial sino como algo activo.



Agregó que en los archivos no debe existir la gigantocracia, aunque, por el otro lado, existen los que piensan que no se debe documentar sino documentalizar el arte, transformando las piezas en pura referencialidad histórica. Ambas son propuestas alternas, explicó.



Después de comentar que “la insensatez tecnológica, la locura ecológica y la demencia ideológica, combinadas con la ingeniería genética harán que seamos los últimos homo sapiens”, el egresado de la Universidad de Harvard dijo que “la digitalización de la cultura es apenas el preámbulo de la digitalización de la naturaleza, de la materia misma” y señaló que la palabra clave para nuestra época crepuscular no es revolución sino mutación, transfiguración y transustación, en su más radical sentido espiritual y político.



En tiempos mutantes, agregó, las culturas son apocalípticas. En estos momentos todo ha de ser revelado en su esencia de diferencia y de contradicción, comentó el investigador interesado en la relación del arte con la violencia, la política y la religión.



Todo ello viene al caso porque se pretende rescatar archivos de arte contemporáneo. El rescate debe ser actual, pero también radical: para ir a la raíz es necesario recorrer los extremos, agregó.