En la Biblioteca de México
Vive la Música permitió a la gente llegar al corazón de la Orquesta Escuela Carlos Chávez
· Obertura Egmont, Plink, plank, plunk! y La máquina de escribir, Danzón No. 8 y Huapango, piezas interpretadas
· El Programa Nacional de Animación Cultural y el Sistema Nacional de Fomento Musical organizaron el segundo concierto
Audio: Adjunto
¿Cómo late el corazón de una orquesta? Familias, jóvenes y adultos mayores tuvieron la oportunidad de conocer la respuesta durante el segundo concierto del ciclo Vive la música, a cargo de la Orquesta Escuela Carlos Chávez, la tarde de este domingo 13 de septiembre en la Biblioteca de México.
Organizada por el Programa Nacional de Animación Cultural y el Sistema Nacional de Fomento Musical (SNFM), del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), la presentación permitió que 394 personas se sentaran entre las diferentes secciones de instrumentos, al lado de los músicos para vivir de cerca la experiencia de cómo se preparan y ejecutan cada una de las obras.
En entrevista con el Conaculta, el director invitado, Roberto Rentería, destacó que el propósito es que los asistentes escuchen la diferencia de estar en un concierto convencional donde la orquesta está al frente del auditorio. Se trata de que respiren junto con los músicos y sientan la sonoridad desde dentro.
En esta ocasión el programa estuvo conformado por la Obertura Egmont, de Ludwig van Beethoven: Plink, plank, plunk! y La máquina de escribir, de LeRoy Anderson; el Danzón No. 8, de Arturo Márquez, y el Huapango, de José Pablo Moncayo.
“La idea es que se conozcan diferentes estilos de música, desde la clásica hasta la parte de la música moderna del siglo XX, pasando por el repertorio sinfónico de México. Es bueno que la gente conozca toda esta diversidad y vea que la música puede ser mucho más atractiva que esa falsa idea de que es pura seriedad”.
Aseguró que como director se enfrenta a diversos retos al tener a la orquesta en 360 grados con 80 integrantes, lo que incluso genera otra respuesta sonora al ubicarse al centro.
“Hay que tener mucho control para saber dónde quedaron distribuidos los instrumentos y ayudarles a los jóvenes a que también entiendan que a pesar de estar en un ubicación diferente a la habitual pueden conectarse con otra sección instrumental y hacer música juntos”, dijo.
Se trató de un concierto didáctico, tanto para los instrumentistas como para el público que pudo constatar que formar parte de una orquesta no es asunto sencillo: hay que saber respirar, tomar el instrumento, contar compases, estar pendiente de las indicaciones del director y de sus compañeros.
Roberto Rentería ofreció detalles del trabajo orquestal y de las piezas a interpretar, lo cual permitió apreciar las diferentes sonoridades de las maderas, las cuerdas, la familia de instrumentos de aliento y metales en cada uno de los géneros musicales, además de hacerse de información sobre los compositores y sus obras.
Los niños y adolescentes parecían los más interesados en conocer las reacciones de los músicos y miraban con asombro las notas de las partituras, al mismo tiempo que escuchaban los sonidos del instrumento más cercano: una flauta, un violonchelo, las percusiones o el violín.
Las creaciones que más emocionaron y llamaron la atención fueron La máquina de escribir, debido a su espíritu divertido y juguetón, el Danzón No. 8 por representar una verdadera lección de baile y el Huapango de Moncayo formado por los sones veracruzanos Siqui sirí, El balalú y Gavilancito.
Alrededor de 160 personas que no alcanzaron a ingresar al Patio Octavio Paz pudieron disfrutar de la transmisión del concierto en el Patio del Cine.
Roberto Rentería agregó que la Orquesta Escuela Carlos Chávez se encuentra en un momento importante, no sólo a nivel orquestal, sino también en su programa académico, pues se acaba de titular la primera generación de nivel licenciatura avalada por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
“Los chicos están en un proceso de formación y profesionalización y muchos de ellos se integran a la vida profesional como músicos de las mejores orquestas del país”, afirmó.
Los próximos conciertos del ciclo Vive la Música tendrán lugar el 11 de octubre, el 29 de noviembre y 13 y 19 de diciembre, a las 13:30 horas en el Patio Octavio Paz de la Biblioteca de México. La entrada es libre.
La Biblioteca de México se ubica en Plaza de La Ciudadela, Tolsá No. 4, colonia Centro, Delegación Cuauhtémoc, Distrito Federal, México. Para mayores informes consulte la cartelera en: http://snfm.conaculta.gob.mx/
CGP