En Cuernavaca, Morelos



Inauguran III Congreso Internacional sobre Experiencias en la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial



· Además de cuidar monumentos arqueológicos, se debe profundizar en la investigación antropológica: Teresa Franco



· El encuentro se realizará hasta el 6 de septiembre; participan 330 ponentes de 22 países y 18 estados



Video: http://bit.ly/1i2b6lN

Cuernavaca, Morelos.- “El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tienen gran responsabilidad y compromiso frente a la sociedad para visibilizar y proteger el patrimonio vivo o inmaterial de nuestro país y un inmenso conjunto de saberes, valores, significados, símbolos y prácticas que nos enriquecen, singularizan y nos vinculan con la comunidad internacional, favoreciendo el diálogo intercultural”.



Así lo aseguró la directora general del INAH, María Teresa Franco, al inaugurar el III Congreso Internacional sobre Experiencias en la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial (CIESPI), la mañana de este jueves 3 de septiembre.



Con la representación del presidente del Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, la titular del INAH señaló que hablar del patrimonio inmaterial es hablar de un patrimonio vivo, de la diversidad cultural del mundo y de un país pluricultural y multilingüe como es México.



Destacó que hace apenas 12 años, México se hizo presente en esta área a través del trabajo desarrollado por la investigadora Lourdes Arizpe, alrededor del patrimonio cultural vivo reconocido en la Convención Internacional para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial publicada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 2003.



Para María Teresa Franco este tercer congreso replantea a las instituciones culturales cómo deben ejercer sus tareas y los encargos sociales que tienen, pues además del cuidado de los monumentos arqueológicos e históricos, existe la necesidad de profundizar en la investigación antropológica e histórica de nuestras culturas y poblaciones contemporáneas.



“El grupo de ponentes permitirá ver de qué manera la convención ha echado raíces en tres principios que para México son fundamentales: los conceptos de representatividad y autenticidad del patrimonio cultural, la aportación de la diversidad en los procesos de conservación de bienes patrimoniales y los portadores como transmisores de los valores culturales del patrimonio”.



Recordó que desde hace un lustro el INAH inició estos encuentros y hasta el momento cuenta con 71 proyectos de investigación relacionados con el patrimonio inmaterial y hay 207 investigadores del instituto que están dispuestos a colaborar a nivel nacional e internacional.



“Es sorprendente la forma como crece la demanda de peritajes antropológicos; es un signo a considerar para pensar de qué manera las comunidades hacen valer el derecho a su cultura y a la exigencia a que se escuche su voz”, dijo.



Durante su intervención la profesora del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la UNAM, Lourdes Arizpe, manifestó que ya no son válidas las categorías del pasado, donde se hacía una división tajante entre lo antiguo y lo nuevo; lo indígena y lo mestizo; el folclor y el arte; lo auténtico y lo no auténtico en una época de gran aceleración comunicativa, por lo cual hoy resulta fundamental salvaguardar y reconfigurar lo que nos da la noción de lo que somos.



“El patrimonio cultural inmaterial no es un residuo del pasado, cambia siempre. Tampoco es un folclor exótico, así se pensaba en la época colonial o se piensa cuando a los turistas se les muestran documentales de seres pasivos, cuando es gente con filosofía, con una capacidad de crear nuevos símbolos y significados.



“Tenemos en las manos una creatividad que reconocer y propiciar que corre de los grupos de danzantes y artesanos en sus comunidades locales hasta el gran arte que produce México”.



La también coordinadora de la Cátedra UNESCO sobre Patrimonio Cultural Inmaterial y Diversidad Cultural en la Universidad Nacional Autónoma de México aseguró que el congreso servirá para plantear nuevas interrogantes.



“Habría que preguntarnos cómo se decide cuáles son las manifestaciones culturales que se proponen para la lista representativa, qué reconocimiento político y social expresan las instituciones públicas acerca de estas manifestaciones y lo más importante: cómo ayudan las instituciones a fortalecer las condiciones para que los propios creadores sigan produciendo sus culturas”.



El acto estuvo encabezado por el gobernador Graco Ramírez Garrido, y la secretaria de Cultura de Morelos, Cristina Faesler, y la directora de Culturas Populares del Conaculta, Alejandra Frausto.



También estuvieron Margarita Velázquez, directora del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias; Cecile Duvelle, jefa de la sección del Patrimonio Inmaterial de la UNESCO; Koichiro Matsuura, exdirector general de la UNESCO; Fernando Villafuerte Medina, del Centro Regional para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural e Inmaterial de América Latina; Rodolfo Stavenhagen, investigador de culturas populares, y Nuria Sáenz, representante de la UNESCO en México.



El III Congreso Internacional sobre Experiencias en la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial se llevará a cabo hasta el 6 de septiembre y reunirá a 330 ponentes procedentes de 18 estados de la República Mexicana, así como de 22 países, entre académicos, investigadores, promotores y, especialmente, practicantes de diversas expresiones culturales en sus comunidades de origen.



CGP