Líneas de vida, de Saúl Kaminer, plantea una metáfora de la vida y sus diversas etapas en el Jardín Escultórico
En el Jardín Escultórico del Museo de Arte Moderno (MAM) del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) se presenta la pieza Líneas de vida, de Saúl Kaminer, la cual ha sido visitada hasta el momento por más de 6 mil 400 personas. Se trata de un trabajo que forma parte del ciclo de intervenciones del recinto museístico y en el que el artista ofrece una metáfora de la vida y sus diversas etapas.
Dicho trabajo fue creado in situ por el escultor quien, partiendo de la geometría ondulatoria de la línea, creó una estructura integrada por 16 piezas de metal policromado que integran un conjunto donde los colores y las formas hacen referencia al proceso vital, y en el cual la relación de los elementos compositivos con la luz solar y el entorno natural conforman un juego de luces y sombras, así como movimientos centrífugos y centrípetos.
“El programa de Intervenciones en el Jardín Escultórico del MAM parte del hecho de que lo concebimos como la sexta sala del recinto y surge de la idea del encuentro del espacio público con el arte. Este ciclo retoma ese espíritu, de repensar y ampliar la experiencia estética de los visitantes, por lo que hemos invitado a una serie de artistas para que desarrollen sus intervenciones in situ. El programa ha sido exitoso porque es otra forma de vivir el jardín”, comentó en entrevista Brenda Caro, jefa de curaduría del recinto del Inbal.
Explicó que la pieza de Saúl Kaminer permite conocer el trabajo de un artista que cuenta con 50 años de trayectoria, la cual abarca gráfica, escultura y pintura, pero lo interesante de su trabajo escultórico es el juego que maneja con la bidimensionalidad y tridimensionalidad. Al ser arquitecto, sus piezas tienen una forma muy particular de abordar el espacio.
La obra Líneas de vida es una intervención en la cual trabaja con la idea de la geometría de la línea. “Además de tener una línea recta, se tiene una línea que se curva, se prolonga, se proyecta, se despliega y se enreda, y junto con este ejercicio de investigación de la geometría de la línea se logra una aproximación metafórica a la idea de los procesos vitales, a la idea de que la vida no es una línea recta, sino que está conformada por estas idas y venires”.
Explicó que Kaminer cuenta con un quehacer artístico que ha atravesado por diversas etapas y líneas de investigación. “Por un lado, tiene un trabajo que muestra los vínculos entre bidimensionalidad y tridimensionalidad, dentro de un juego entre la gráfica y la escultura, además de haber trabajado, por un largo tiempo, utilizando la máscara y el tótem. En el caso particular de Líneas de vida, lo que resulta interesante es como convive el trabajo artístico con la naturaleza, y el juego entre la luz y la sombra que dimensiona la cualidad espacial de su exploración lineal”.
Nacido en la Ciudad de México en 1952, Saúl Kaminer estudió arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México y realizó una maestría en el Instituto de Urbanismo de París. En 1976 se trasladó a la capital francesa. Fue miembro fundador del grupo MAGIA-IMAGEN, compuesto por ocho artistas latinoamericanos, activo de 1982 a 1992. Ha realizado múltiples exposiciones individuales y colectivas. Durante su trayectoria ha recibido diversas distinciones y reconocimientos, y desde 1997 es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte.
La pieza Líneas de vida podrá ser visitada hasta el domingo 27 de octubre. El horario del MAM es de martes a domingo de 10:15 a 17:45 h. Se localiza en Paseo de la Reforma y Gandhi, Primera Sección del Bosque de Chapultepec. Entrada libre.