Luna Eva. Canto poético colectivo al amor y a la esperanza llega al Palacio de Bellas Artes
Con actos de suspensión capilar, equilibrio mano a mano, acrobacia mezclada con danza (acrodanza), malabarismo excéntrico, mástil, cintas aéreas y rueda Cyr, espectáculo que contará siete historias que nacen como ensoñaciones al cantar una canción de cuna, inmersas en el inconmensurable amor que se vive con el nacimiento de una hija y la muerte de una abuelita durante el encierro de la COVID-19 que marcó al mundo en tiempos recientes.
Todo acontece de noche. En cada una de sus siete fases, la Luna Eva, en su crecer o decrecer, revelará un secreto de vida, un encuentro, una misión, un misterio, un amor, una despedida, una alegría y una ilusión.
La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través de la Coordinación Nacional de Teatro y la compañía Cirko de Mente, presentan Luna Eva. Canto poético colectivo al amor y a la esperanza, un espacio diseñado como una instalación por el artista visual Alain Kerriou —quien ha hecho también el diseño del vestuario y la iluminación— y la valiosa aportación llena de atmósferas sonoras del artista vocal y compositor Juan Pablo Villa, quien interpreta la música original en vivo y es también uno de los personajes.
Este espectáculo de circo contemporáneo, que aborda los ciclos de la vida desde el territorio de los sueños, se presentará el 29 de junio a las 20:00 h en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.
Bajo la dirección de Andrea Peláez González, el montaje ha sido reconocido por la belleza de su estética y la gran destreza interpretativa de los artistas Andrea Salas, Emiliano Gallardo, Fernanda Palacios, Leonardo Costantini, Nallely Lima y Óscar Ontiveros.
De noche, en el territorio de los sueños todo es posible, siete pasajeros de una pequeña nave reciben señales de la Luna Eva, ese satélite que refleja la luz solar y cada noche cambia. Sin importar el pequeño tamaño de la barca, el viaje está en marcha, la vida en tránsito les depara misterios en el horizonte, la Luna crece y decrece, desaparece y vuelve a llenarse, las mareas suben y bajan.
En esta embarcación hay que aprender a contener y soltar, a acompañar, a confiar en la luz que refleja la sabia Luna Eva, luz primera, la que toca, la que guía en la más profunda oscuridad y llena de esperanza y amor. Que habla de los ciclos y las intersecciones espaciotemporales de llegadas y partidas, de las espirales, de los ciclos, de la existencia en su dimensión mágica.
En este montaje circense las sonoridades se generan en vivo interactuando con las interpretaciones de las y los intérpretes. El espacio escénico estará concebido como una instalación plástica, sonora, circense, a partir del uso de una estructura autoportante para números aéreos, un mástil, una proa, un espejo de agua y dos Lunas (espejos autoiluminados que reflejan luz, dirigida por los artistas en escena) evocando el ambiente de altamar en una cubierta de embarcación pesquera muy pequeña.
La estética general de la iluminación, escenografía y vestuario es minimalista con la intención de focalizar la atención del espectador en los sucesos escénicos ejecutados en vivo, en las sensaciones y emociones profundas de los acontecimientos narrados a través de un discurso de movimiento de alto nivel técnico circense contemporáneo, visual y musical.
La dirección técnica estará a cargo de Leonardo Costantini, la coordinación de producción es de Emiliano Gallardo, la asesoría de clown por parte de Jesús Díaz y la asesoría de “Tango” por parte de Claudia Lora y Carlos Blanco.