Yaxunah en Yucatán, un viaje ancestral por la Cultura Maya
Yucatán es uno de los lugares donde, hace varios siglos, los mayas se establecieron en distintos puntos del Estado, construyeron grandes e impresionantes ciudades como Uxmal, Kabah, Labná, Mayapán o Chichén Itzá, que hoy en día, son símbolo de una civilización sin precedente, dando origen a lo que hoy conocemos como la Cultura Maya, que aún se mantiene viva entre un gran número de comunidades indígenas.
Yaxunah es una de estas comunidades mayas que ha preservado su cultura e identidad y cuenta con una población de 700 habitantes. Está ubicada en el municipio de Yaxcaba, cerca de Pisté y a unos 25 o 30 minutos de Chichén Itzá. Conserva sus costumbres, creencias, lengua maya, vestimenta y casas tradicionales construidas con madera y huano (especie de palmera); sus pobladores, mujeres y hombres descendientes de la Cultura Maya, se han organizado en tres grupos: Lol Kum, Compadres y el Parador Turístico, para ofrecer visitas a la comunidad y recibir visitantes de diferentes partes del mundo para poder vivir experiencias únicas de naturaleza, gastronomía y cultura que incluyen alojamiento en cabañas, alimentación y actividades en la comunidad.
En la visita a la comunidad se puede escoger entre las actividades que ofrecen: Inmersión al Maíz, que es la oportunidad ideal para conocer el proceso de producción de este alimento tan importante para los mayas, que representa el espíritu del pueblo; preparación de la Cochinita, típica comida maya cocinada al horno pib, bajo tierra envuelto en hojas de plátano; Talleres de artesanías, donde artesanos muy habilidosos les enseñarán sus obras con gusto y lo invitarán a participar en parte del proceso; visita a la zona arqueológica y al cenote o, un día entero en la comunidad.
Los habitantes se han organizado en una cooperativa con la que son ejemplo de un modelo de turismo comunitario y el 10% de e lo recaudado en cada actividad turística se destina a un ahorro comunitario para proyectos locales. Además de tener la oferta turística de la que muchos de ellos obtienen sustento económico, promueven y aún mantienen la cultura de la cosecha de frijol, jamaica, calabaza y maíz, con lo que producen maíz con coco, pozole de tortilla, choko sakán y sa’kab de maíz, entre otros productos, de los cuales son consumidores, siendo así, una comunidad sustentable.
El lugar es pequeño, pero en el Parador Turístico se puede rentar una bicicleta y pedalear hasta la zona arqueológica de Yaxunah, que está a escasos 10 minutos, donde acompañado de alguno de los promotores culturales, como ellos suelen nombrarse y que contarán a detalle todo lo que saben de la zona, encontrarás monumentales construcciones, rodeadas de milpas y densa vegetación. Se sabe que esta zona arqueológica estuvo comunicada con Chichén Itzá y Cobá a través de un sacbé (camino blanco), de hasta 100 km, por lo cual se piensa que pudo ser una frontera política. Alcanzó su máximo esplendor entre los años 900 y 600 a.C.
Las huellas encontradas en la zona revelan que la ciudad tuvo una agricultura intensa y que debió ser sostén para la numerosa población del norte peninsular, aunque después fuera abandonada y destruida mucho antes de la llegada de los españoles, alrededor del siglo X ó XI.
De regreso al poblado, visitar el Banco de Semillas, será una experiencia única, donde esta comunidad ofrece semillas a quien las requiera para la siembra con la condición de devolver estas, cuando obtenga la cosecha y así conservan las semillas. Además de que a través del proyecto Traspatio Maya venden los productos de la cosecha a diferentes partes de Yucatán.
En la comunidad también hay muchos artesanos, algunos de ellos han aprendido a trabajar la madera realizando originales y coloridos diseños de máscaras, calendarios mayas y llaveros, pero también hay otro grupo de estos que trabaja el cuerno de toro, con lo que hacen accesorios como collares, pulseras, aretes y más, de un diseño único y realmente hermosos.
El urdido de hamacas es otro de los oficios de esta comunidad de indígenas mayas, producen hamacas de algodón adornadas con crochet. Como dato curioso, la fabricación de este tipo de hamaca les lleva hasta tres semanas realizarla. Este grupo de mujeres artesanas, también realizan pedidos especiales, incluso para lámparas y otros accesorios.
Los artesanos se encuentran a un costado del Banco de Semillas, a tan sólo unos cinco minutos del cenote Lol – há, que significa flor o capullo de agua. Desde la entrada a este, que se encuentra cercado, se puede observar su gran profundidad, rodeado de muchos árboles de diferentes tipos que son hogar de una gran variedad de animales, como golondrinas, búhos y el pájaro toh, además de ardillas y mapaches.
De regreso al parador turístico, se encuentra frente a este, el Centro Cultural Comunitario de Yaxunah, que cuenta con un jardín botánico, una biblioteca, una sala de usos múltiples y un área de eventos al aire libre. Dentro, se instaló el Museo Comunitario, donde se realizó una museografía que lleva el siguiente orden: área maya, área prehispánica de la comunidad (zona arqueológica local), área de entierros prehispánicos y coloniales, área de las haciendas coloniales, área de ritos, fiestas y tradiciones locales, área de los niños de la comunidad.
Para finalizar, la deliciosa gastronomía local, preparada por las cocineras tradicionales de la comunidad, cerrarán con broche de oro la visita por esta Comisaría. El olor de las hierbas quemadas bajo tierra que cubren los recipientes donde preparan la cochinita o el relleno negro, entre otros platillos, llenarán tus sentidos y despertarán tu apetito, para que, con unas tortillas calientitas y recién hechas a mano, disfrutes de los sabores de la cocina maya.
Yaxunah, como comunidad maya, es considerada para formar parte del programa Aldeas Mayas de Yucatán de la Secretaría de Fomento Turístico de la entidad (Sefotur), con el que se busca integrar un circuito turístico de comunidades indígenas y centros turísticos mayas en el Estado, para diversificar la oferta de atractivos a través de un producto turístico innovador para los visitantes que están en la búsqueda de estas experiencias.
Para que la visita sea la mejor, recomendamos tomar en cuenta las siguientes recomendaciones:
Contactar con la cooperativa para coordinar la visita, en Facebook se encuentran como Parador Turístico Yaxunah y los números de contacto por Whatsapp es 985 114 0808
Llevar ropa fresca y zapatos cómodos, sombrero o gorra para la caminata en la zona arqueológica y el pueblo.
Para visitar el cenote, usar sandalias y traje de baño, así como el repelente y bloqueador deben ser ecológicos para no dañar el agua del cenote.
Hidratarse es indispensable
La cooperativa desea que todos los visitantes se sientan tranquilos y con la confianza de estar cuidando su salud, por lo que ha implementado estrictas medidas de seguridad sanitaria, como el proceso de desinfección de automóviles al ingresar al poblado, proporcionar gel antibacterial en todos los puntos de visita, el uso obligatorio de cubrebocas y la toma de temperatura a través de termómetros digitales en el parador turístico.