En Querétaro

Jóvenes de la OSIM complementan su preparación con actividades

recreativas

ï‚· Además de los ensayos musicales, los 123 instrumentistas participan en
torneos deportivos, concursos de baile y un Festival del Ego
Amealco, Querétaro. - Ensayos seccionales y con toda la orquesta, así como
actividades recreativas y de integración, forman parte de la metodología del
campamento de estudio de la Orquesta Sinfónica Infantil de México (OSIM) que
desde el 21 de julio se desarrolla en un hotel queretano el cual es inundado de los
sonidos de las flautas, los violines, contrabajos, violas, clarinetes y demás
instrumentos.

Roberto Rentería Yrene, coordinador general de la OSIM, señala en entrevista
que las jornadas de práctica musical son de entre 8 y 9 horas diarias, donde los
alumnos divididos en 16 secciones (según su instrumento) trabajan con su profesor,
quienes de manera personalizada dan indicaciones y consejos, cómo el estar bien
posicionados, concentrarse y sonreír.

“Es impresionante como a pesar del tiempo dedicado a los ensayos y
preparación del programa los chicos se levantan temprano y empiezan a estudiar
desde las 7 de la mañana, y después de la cena aún van a salones y siguen
practicando a veces hasta las 11 de la noche, creo es una manera también de auto
cargarse de energía”.

El funcionario quien también funge como director asociado de los conciertos
de la 27 gira nacional de la orquesta, destaca que el campamento no consiste sólo
de “practicar y practicar”, por lo que realizan actividades lúdicas y deportivas para
ofrecerle a los 123 participantes momentos de dispersión y distracción con las que
liberan y relajan su mente.

“Los jóvenes tienen el compromiso y obligación de aprender, pero
divirtiéndose, por ello se hacen torneos de futbol, jenga, billar, natación, karaoke,
baile, y los chicos organizan una orquesta de salsa en vivo. Hay muchos alumnos

que no sólo tienen un talento musical, hay quien canta, es deportista, hace teatro en
casa, por eso se realizan este tipo de acciones adicionales”.

En los últimos días del campamento, a concluir el 3 de agosto, se han
realizado las semifinales de un torneo de futbol, un torneo de natación y waterpolo,
proyección de películas, un concurso de fotografía, de baile y el Festival del Ego.

“En el concurso de fotografía los chicos pudieron expresar lo que significa la
orquesta o el proyecto. Creemos que cada una de las actividades ofrecen una
importante dinámica, porque además de la unión que se logra con la música,
fortalece vínculos sin importar que los muchachos sean del norte, del sur, del centro
occidente o de otra parte del país”.

Estas actividades de recreación son voluntarias para los jóvenes, abunda
Rentería Yrene. “No hay un chico que no se quede sin participar en al menos una
actividad, ya sea de canto, de baile, de pintura.

“Desde que llegaron tuvieron un día de vinculación, conocen a sus demás
compañeros, cuentan con un grupo de tutores que se encarga de vigilarlos las 24
horas, revisan que coman, no les dé nostalgia o tristeza, pues para muchos es la
primera vez que están tanto tiempo lejos de casa”.

En el duodécimo día de campamento OSIM, los chicos practicaron en sus
respectivas secciones y luego tuvieron un ensayo tutti con el pianista ruso Vladimir
Petrov, para después de los alimentos dar vida al Festival del ego, una actividad
donde los instrumentistas eligen cómo y con quién lucir sus capacidades musicales
y escénicas.

“Cada uno de los chicos se pudo presentar solito o en equipo, prepararon por
ejemplo una pieza de violín, piden asesorías, pero lo toman con calma y como un
juego, es una actividad que se realiza el primer año de campamento y se ha
mantenido”, destaca Eduardo García Barrios, titular del Sistema Nacional de
Fomento Musical de la Secretaría de Cultura.

En el Festival del Ego, vestidos de manera casual y en ambiente relajado,
tanto alumnos y maestros compartieron sus talentos, en la que se escuchó música
de Vivaldi, Haendel, y otros compositores clásicos, y a distintas secciones de
instrumentos como los metales, violines, percusiones, cornos, y arpas, al tiempo
que eran vitoreados y aplaudidos.


El doceavo día de actividades cerró con un concurso de baile al que se
inscribieron diez parejas las cuáles frente a un estricto jurado, mostraron sus
conocimientos en waltz, rock and roll, quebradita, merengue, salsa y reggaetón,
posteriormente se abrió la pista de baile para quien lo quisiera sacara a relucir sus
mejores pasos.

El campamento de la OSIM concluirá el 3 de agosto. Del 4 al 6 de agosto la
agrupación realizará su 27 gira nacional, con presentaciones en el Teatro Ocampo
de Cuernavaca, Morelos, el Palacio de Bellas Artes y la Biblioteca Vasconcelos,
ambos en la Ciudad de México.

El programa por ejecutar será: la Obertura de la ópera La urraca ladrona, de
Gioachino Rossini; el primer movimiento del Concierto para Piano Núm. 1, Op. 23
en si be bemol, de Piotr Ilich Chaikovski; Janitzio, de Silvestre Revueltas; Tierra de
temporal, de José Pablo Moncayo; Suite del ballet, Estancia, Los trabajadores
agrícolas, y Danza final Malambo, las cuatro de Alberto Ginastera; y el Danzón No.
2, de Arturo Márquez.

Para más información de los conciertos visite: http://snfm.cultura.gob.mx.

DAF