El Museo de Arte Moderno recibirá la muestra Inasible. Colección fotográfica MAM
· Integrada por más de 60 obras que generan analogías entre piezas de diferentes épocas y autores de prácticas diversas
Un panorama del quehacer fotográfico en México en torno a los usos de la imagen llegará al Museo de Arte Moderno (MAM) en la exposición Inasible. Colección fotográfica MAM, que podrá visitarse 29 de julio de 2018.
Curada por Iñaki Herranz, la muestra permite apreciar un conjunto selecto de la colección de fotografía del MAM bajo un ángulo contemplativo y existencial. Resalta analogías entre obras de diferentes épocas y autores de prácticas diversas, las cuales se hilvanan alrededor de nuestra condición mortal y lo efímero de la existencia.
El recorrido se articula según géneros o tópicos de la disciplina (en ocasiones contraponiéndolos o mezclándolos y también otorgándoles una nueva categoría a algunas imágenes), como paisaje bucólico, fotografía de guerra, naturaleza muerta, sublimación del objeto, vanidad, fotografía puesta en escena, ensueño, fotoensayo, erotismo, etc., mientras se entremezclan vanguardias, prácticas contemporáneas, impresiones de la modernidad o testimonios decimonónicos.
Está integrada por más de 60 obras de la colección permanente del MAM, muchas de ellas icónicas, pertenecientes a decenas de artistas mexicanos o residentes en el país como Tufik Yazbek, Pablo López Luz, Francisco Mata, Rodrigo Moya, Adolfo Patiño, Lourdes Grobet, Nacho López, Eniac Martínez, Mónica Castillo, Sebastián Romo, Juan Crisóstomo Méndez, Enrique Metinides, Edward Weston, Manuel Álvarez Bravo, Héctor García, Antonio Caballero, Graciela Iturbide, Gabriel Orozco, Armando Salas Portugal, Marco Antonio Cruz, Lola Álvarez Bravo, Eugenia Rendón de Olazábal, Henri Cartier-Bresson, los hermanos Mayo, entre otros.
El origen del acervo fotográfico del MAM se remonta a 1973 cuando se adquirieron 400 obras de Manuel Álvarez Bravo; son el acervo más importante de su obra reunido en un museo del INBA. Este conjunto abarca cerca de cinco décadas de producción, desde 1925 hasta 1972. De modo paralelo a dicha adquisición, Manuel Álvarez Bravo donó un valioso fondo de fotografías que él mismo coleccionó (daguerrotipos, ambrotipos, ferrotipos y talbotipos, álbumes de fotografía antigua y una cámara de Daguerre, imágenes de Edward Weston, Tina Modotti y Henri Cartier-Bresson, por mencionar algunos).