Una invitación a conocer La Condesa y sus fantasmas



o Visita literaria a cargo del escritor Alejandro Toledo, el domingo 25 de septiembre



o Los sitios clave del recorrido serán las casas de José Emilio Pacheco, Octavio Paz y Salvador Elizondo



Si cada resquicio de la ciudad alberga la historia de quienes la transitaron, cuántos mitos guardará la colonia Hipódromo Condesa, cuyos parques y edificios fueron escenarios que inspiraron a personajes como Salvador Elizonodo, Esther Seligson, Octavio Paz, José Emilio Pacheco, Elena Garro o Francisco Tario.



En el recorrido La Condesa y sus fantasmas, Alejandro Toledo caminará por las avenidas en las que fluctúa el pasado y el presente literario de México, y guiará al público por las casas, o fortalezas de libros, que sirvieron de refugio e inspiración a estos personajes. La cita será el domingo 25 de septiembre a las 10:00 en el Centro Cultural Bella Época, ubicado en Tamaulipas 202.



Para esta visita literaria, el narrador y ensayista recomienda la lectura de Teoría del Candingas, de Salvador Elizondo; Un hogar sólido, de Elena Garro; Tenga para que se entretenga, de José Emilio Pacheco; El ramo azul, de Octavio Paz; Por el monte hacia la mar, de Esther Seligson y La noche de Margaret Rose, de Francisco Tario.



A decir de Alejandro Toledo, esta colonia se puede visitar por lo que hay ahora, “por los vivos que están ahí”, sin dejar de lado las figuras de la literatura nacional que han vivido entre sus calles, con las que él convivió de alguna manera u otra, ya fuera de manera directa o como ferviente lector de sus obras.



“Con José Emilio Pacheco conversé alguna vez en su biblioteca, y un poco me regañó, y otra me entendió, porque me distraía al charlar con él por ese mar de libros interesantes que nos rodeaba”, compartió el también periodista cultural.



Toledo comentó que varias veces visitó para conversar a Esther Seligson, quien vivía en un departamento enfrente del Parque México, y aseguró: “Para mí es una gran escritora, una de las más importantes del siglo XX”. En la misma calle vivió Salvador Elizondo, en un edificio que lo inspiró para crear la atmósfera de Farabeuf (1965).

“Podríamos haber cerrado el círculo en casa de Federico Campbell para admirar su buzón que es un homenaje a ‘la sonrisa vertical’, los carteros se sonrojan al meter los sobres ahí, como si estuvieran cometiendo una violación”, indicó.



A unas calles del Centro Cultural Bella Época, que antes fue un conocido cine y del cual hoy solamente permanece una sala, está la casa que fue de Alfonso Reyes, en lo que ahora se conoce como la Capilla Alfonsina. A la vuelta del recinto cultural se encuentra la casa en la que vivió José Emilio Pacheco.



En la visita literaria La Condesa y sus fantasmas, Alejandro Toledo aprovechará para mostrarle a los asistentes la casa que perteneció a la familia Peláez Farell, en donde se llevaban a cabo tertulias a las que asistían los vecinos de la zona, entre los que se encontraban Octavio Paz, Elena Garro y Francisco Tario.