Rubbish Rabbit es un espectáculo anarquista, nacido para desatar la alegría de vivir y la infinita libertad que el estar vivos nos concede. Se trata de un juego frenético en el que las palabras y las acciones se persiguen en una carrera sin fin, una sucesión implacable de risas y tensión para el público. El deseo de todo payaso es encontrar al niño que está dentro de cada uno de nosotros y darle todo el espacio posible… y, con esta obra, la compañía Tony Clifton Circus lo consigue rotundamente. Pero los niños y las niñas, cuando están libres, son de lo más peligroso que puede existir en el mundo, son capaces de crear caos, ruido y destrucción total, que son justamente los ingredientes de esta obra.
