Alejandro Bichir regresa a los escenarios de forma sorprendente, además de dirigir, interpreta al último
preso acompañado de sus hijos Bruno y Demián quien fue nominado en 2012 al Oscar por su trabajo en la
película A better life y que ha ensayado a larga distancia el papel para integrarse al elenco exclusivamente
en las ciudades Tijuana, Mexicali y Los Ángeles.