De El Colmillo Público a La Ceiba Gráfica, un siglo de arte gráfico en el Munae



Ø Ambas exposiciones provienen de donaciones recibidas por el Munae



Ø Se homenajea a uno de los caricaturistas más críticos que ha tenido México, José Martínez Carrión y se abre brecha a una generación perdida: curador



Ø Se celebran diez años de La Ceiba Gráfica, “una obra de fe más que de fuerzas”




Jesús Martínez Carrión y El Colmillo Público. Del trazo costumbrista a la línea revolucionaria y La Ceiba Gráfica: Estampas de una década son dos muestras con las que el Museo Nacional de la Estampa (Munae) revalora a uno de los caricaturistas más críticos de inicios del siglo pasado: Jesús Martínez Carrión, y celebra los diez años de un proyecto artístico que ha posicionado la litografía mexicana a nivel internacional.




A decir del director, Santiago Pérez Garci, las muestras, que parten del Programa de Revisiones Curatoriales de los Acervos Artísticos del Munae, están enfocadas a dos generosas donaciones que se han formalizado en años recientes: La de 2011, que es una serie de obras provenientes de la asociación civil Artistas Veracruzanos Bajo la Ceiba, y la segunda, correspondiente a la donación de más de 100 cartones publicados en la emblemática revista El Colmillo Publico, del caricaturista Jesús Martínez Carrión”, realizada en 2014.




Rescate de un caricaturista y de un artista relegado en la historia del arte mexicano.


El curador de la exposición Jesús Martínez Carrión y El Colmillo Público. Del trazo costumbrista a la línea revolucionaria, Agustín Sánchez, explicó que Martínez Carrión perteneció a la generación de caricaturistas opacados por Posada: Con esta muestra se rescata una trayectoria poco reconocida, cuyo aporte es que influyó de forma determinante en la concientización política del pueblo, en su mayoría analfabeta. Martínez Carrión fue uno de los caricaturistas más influyentes en la prensa política de su época, que acompañó la labor periodística de los hermanos Flores Magón.




Su obra, en el género de la caricatura, puede comprenderse, a decir del curador de la muestra, como precursora del movimiento revolucionario que estallaría en 1910, unos años después de la reclusión y muerte del artista.




El curador explicó que, a través del recorrido, se puede apreciar un retrato de ese momento histórico e identificar cómo se definió política y socialmente nuestro país durante un periodo fundamental del México moderno: el Porfiriato. La obra de Martínez Carrión es el retrato del autoritarismo que prevaleció en México durante los últimos años de Porfirio Díaz en el poder. La caricatura de Martínez Carrión fue una de las expresiones más contundentes de aquellas posiciones políticas que buscaban la democratización del país.




“En esta muestra podemos observar dos facetas del artista, tanto aquella que se identificó con una línea costumbrista, apreciable en un conjunto de acuarelas y estampas litográficas que representan escenas y personajes populares -niños jugando, el borracho, el charro, madre con niños- , y la segunda, identificada con sus caricaturas publicadas en El Colmillo Publico: que configuran una visión crítica, irónica y satírica del gobierno de Porfirio Díaz.




En general, la muestra es un retrato de la vida política y social del México de finales del siglo XIX y de principios del Siglo XX.




Una década de La Ceiba Gráfica


“Una obra de fe más que de fuerzas,” así califica Per Anderson al proyecto que inició en Coatepec, Veracruz y que cumple su primera década: La Ceiba Gráfica




La muestra La Ceiba Gráfica: Estampas de una década reúne 102 obras, desde los primeros experimentos realizados por Per Anderson utilizando el mármol mexicano, como soporte principal para hacer litografía, hasta ejemplos de los diferentes proyectos y colaboraciones artísticas que se han realizado en el taller establecido por Anderson en Coatepec.




La muestra conjunta estampas litográficas, muchas de ellas en gran formato, de célebres autores de la talla de José Luis Cuevas, Gilberto Aceves Navarro, Francisco Castro Leñero, la japonesa Yuko Sasai, Irma Palacios, Saúl Villa, Demián Flores, Alejandro Santiago, Franco Aceves, Roberto Turnbull, Luis Argudín, entre otros artistas.




Para Anderson, fundador del proyecto, los dos aspectos que se buscan rescatar son “la litografía como una de las técnicas más difíciles dentro de la gráfica, y el dibujo, pues gracias a esta habilidad es que los artistas son capaces de asimilar la realidad sin que haya una reacción electrónica”.



“Ambas técnicas son medios que humanizan al artista. Para mí, el arte litográfico que se ha producido en La Ceiba es un medio de libertad, pues el artista no está sujeto a apoyos institucionales, ni a las nuevas tecnologías para realizar su obra y expresar lo que realmente le conmueve, sino que hace uso de todos los recursos naturales y humanos que están a su alrededor para lograr su obra. Este es un proceso que humaniza, es un testimonio preciso sobre quién es y qué es lo que desea. Al final son los propios artistas quienes terminan cambiando su actitud frente al arte.”




La Ceiba Gráfica es un proyecto que además se caracteriza por desarrollar, de manera sustentable, toda la infraestructura, mobiliario y equipo para la producción artística, desde las prensas, la tinta, el papel, los lápices y barras para el dibujo litográfico. Hoy día, este proyecto tiene alcances a nivel nacional e internacional y ha logrado el reposicionamiento de una técnica casi olvidada por los artistas. Gracias a la contribución de la Ceiba Gráfica, ha sido posible fomentar y difundir la producción litográfica y abatir los costos que ésta implicaba hasta hace pocos años.