Un millón de gusanos, una novela libre, juguetona, veloz, bien animada, pensada, intelectual y sencilla: Gastón Melo




Rogelio Flores presentó su libro, ganador del Premio Lipp La Brasserie 2015



Un millón de gusanos, novela ganadora del Premio Lipp La Brasserie 2015, narra “la ciudad que me tocó vivir y la cual quería retratar”, dijo Rogelio Flores, durante la presentación de su libro, realizada en el restaurante francés Lipp La Brasserie.



El propietario de dicho lugar, Miguel Ángel Cooley celebró el hecho de haber llegado a la cuarta edición de este premio en México, el cual tiene como antecedente, Le Prix Cazes Brasserie Lipp, que se celebra desde 1935 en el barrio de Saint Germain de Prés, y es considerado como el acontecimiento literario de la primavera parisina.



Gastón Melo, integrante del jurado que le otorgó el galardón, señaló que la obra de Rogelio Flores se maneja con libertad en los distintos lenguajes, él conoce bien el español y se siente cómodo con ciertos tecnicismos médicos, punk y de rockero.



En su opinión Un millón de gusanos es una novela libre, juguetona, veloz, bien animada, pensada, intelectual y sencilla.



Rogelio Flores, quien recibió la publicación de su libro como regalo por su cumpleaños 41, comentó que el libro se remite a su adolescencia y juventud, cuando todo le sorprendía y era una aventura, pero también se deprimía y le gustaba The Cure.



Esa época señaló “fue el caldo de cultivo de esta historia, cuando entré a la universidad, renuncié al mundo convencional y abracé mis ganas de escribir”.



Recordó que años atrás empezó los primeros esbozos, pero hace una década retomó la historia y volvió a escribirla. “Hasta el final me dí cuenta de que hablaba sobre la muerte, todo el tiempo la muerte ronda al personaje principal”.


Emocionado agradeció a Gastón Melo por el prólogo, a Alberto Chimal, por la cuarta de forros, a Jorge F. Muñoz Yorko por las ilustraciones y a Josefina Larrangoitia, de Editorial Resistencia por confiar en la novela.




Durante su intervención, Alberto Chimal comentó que la novela es el repaso de una época, de lo que significaba ser joven en aquel tiempo, de esa generación que estaba viendo el futuro sin darse cuenta. “Estamos ante la oportunidad de encontarrnos con los artefactos de ese pasado y reinterpretar quienes fuimos”.




El ilustrador del libro, Yorko, comentó que trabajó en conjunto con el autor, con quien existió una identificación y buena conexión, ya que encontraron afinidades en cuanto a sus preferencias musicales. Además de que, les tocó vivir la transición del cassete al disco compacto y ambos gustan de los cómics.




El libro escrito por Rogelio Flores fue declarado ganador por el jurado integrado por Xavier Velasco, Alberto Chimal, Cristina Rivera, Silvia Molina, Eduardo Antonio Parra, Mónica Lavín, Beatriz Rivas, Gastón Melo y Mariana Osorio Gumá.



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