El pianista Edmundo González ofrecerá un recital dentro del ciclo Jóvenes en la música


Ø El domingo 19 de julio a las 17:00 horas en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes

“Estoy muy contento de que tocaré en el Palacio de Bellas Artes. Tener obras de Miguel Ángel Buonarroti y de Leonardo da Vinci habla de la categoría que tiene este recinto. Yo que he tenido la suerte de viajar a Estados Unidos, Canadá y Europa, sigo creyendo que el Palacio de Bellas Artes es un lugar muy especial”.



Lo anterior fue expresado por el pianista Edmundo González, quien ofrecerá un concierto el domingo 19 de julio a las 17:00 horas en la Sala Manuel M. Ponce del recinto de mármol, en el marco del ciclo Jóvenes en la música, con piezas de Johann Sebastian Bach, Serguéi Rajmáninov, Gustavo Morales y Alberto Ginastera.

En los lugares donde he vivido fuera de México, los estudiantes quisieran tener oportunidades de este tipo, como las que nos proporciona la Coordinación Nacional de Música y Ópera del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA). En ningún país es fácil conseguir espacios para presentarse y menos para quienes aún están estudiando”.



El joven intérprete, que actualmente cursa el doctorado en estudios musicales en The University of British Columbia de Vancouver, Canadá, recordó que la primera vez que se presentó en el Palacio de Bellas Artes tenía alrededor de 18 años y era estudiante del Conservatorio Nacional de Música (CNM), de donde egresó con honores como pianista concertista.



Empezó a tomar clases de piano desde los cinco años de edad. A los 12 ingresó al CNM, para posteriormente estudiar la maestría en la Meadows School of the Arts de la Southern Methodist University, en Dallas, Texas, Estados Unidos, donde también obtuvo el Performer´s Diploma bajo la guía de Joaquín Achúcarro, toda una leyenda; Alfred Moledous, y el italiano Alessio Bax, que toca con las mejores orquestas en Europa, Asia y Estados Unidos.



“Aprendí mucho en esos cuatro años. Para mí siempre fue obvio que la música era lo mío y que debía seguir estudiando. Acabé la preparatoria y ya estaba decidido que iba a estudiar música. Fue por gusto; nunca lo sentí como una imposición”.



Respecto al programa que eligió para el ciclo Jóvenes en la música, señaló que en un principio deseaba ofrecer algo sencillo. Sin embargo, la Chacona de Bach, con transcripción de Ferruccio Busoni, sobre una partita originalmente escrita para violín, es complicada y demandante, agregó. “Busoni es uno de los mejores pianistas que han existido y la obra que hizo para piano es tremenda.

“También voy a interpretar Variaciones sobre un tema de Corelli de Rajmáninov, quien nunca es fácil y hay que estudiar muchísimo para poder tocarlo bien, y la Suite latinoamericana de Gustavo Morales, quien fue mi primer maestro de piano en el Conservatorio. Las piezas de la suite están inspiradas en el folklor latinoamericano. La primera es un bambuco de Colombia. Le siguen una milonga, un bailecito, un joropo, una danza cubana y una danza negra.



“Algunas de estas composiciones las he tocado desde que tenía 15 años y pensé que me sentiría muy a gusto. Resulta que no sé cómo le hacía para tocarlas. Ahora estoy estudiando y preguntándome cómo le hacía; lo que yo pensaba que iba a ser fácil no resultó tanto.



“Para finalizar interpretaré la Sonata núm. 1 de Alberto Ginastera, una obra muy virtuosa y físicamente muy demandante. Las cuatro piezas que tocaré me gustan mucho. Entonces esa es la motivación que necesito para estudiar.




“Este será mi sexto año fuera del país. Los amigos que tengo aquí siguen siendo mis amigos y también disfruto a la familia cuando vengo de vacaciones en verano y en diciembre. Pienso que siempre es bueno salir de tu casa, de tu ciudad e irte a otro país; experimentar otro idioma y otra cultura. Siempre te deja algo nuevo. A mí, personal y musicalmente, me ha ido muy bien”, concluyó el pianista.