Caballo blanco, de Alicia Martínez Álvarez, hará temporada en noviembre en el Teatro Sergio Magaña



· Una historia de amistad y respeto de un niño y un caballo para hablar de la lealtad y la amistad a través de teatro, máscaras, música y danza

· Del 6 al 28 de noviembre en el recinto de Santa María La Ribera



La compañía de teatro Laboratorio de la Máscara, que dirige Alicia Martínez Álvarez, regresa con Caballo blanco, escrita y dirigida por la también pedagoga teatral y destacada creadora de máscaras mexicana. La pieza –basada en el filme Crín blanca (1953), del cineasta francés Albert Lamorisse– tiene una temporada del 6 al 28 de noviembre en el Teatro Sergio Magaña de la colonia Santa María La Ribera.



Se trata de una exitosa y atractiva propuesta visual y sonora que recurre al mágico lenguaje de la máscara, recurso que sintetiza las acciones y convoca a la poesía que nace de la imaginación y de la versatilidad del ser humano convertido en artista en toda la extensión de la palabra.



Aquí, un caballo, un caballerango, un niño y su abuelo dan cuenta de la eterna lucha entre la opresión y la libertad, entre el respeto y el cuidado de las especies; es un alegato en contra de la domesticación excesiva, que esclaviza y domina, y a favor de la libertad y los sueños. Sus personajes representan a la fuerza, la rebelión, la ambición y la libertad.



Los actores cuentan en el escenario la historia de un viejo pescador y su nieto, quienes viven “donde el río se besa con el mar” y en el que hay caballos en libertad. Un día se encuentran frente a uno de esos equinos, al niño le hace sentir las ganas de cabalgar como una especie libre.



Pero también hay un caballerango a quien no le parece que un caballo no tenga dueño. El niño sabe que ese animal no quiere ser domado y decide ayudarlo a escapar, ser leal a su amigo. En la reflexión, el protagonista entiende sobre los valores de solidaridad, libertad y amor que poco tienen que ver con el deseo de dominación del otro.



Caballo blanco es, además, un espectáculo de actores, de música y danza, de objetos y sonido en el que cada parte constitutiva se articula para ofrecer a la audiencia una obra con “la textura de los sueños”, en palabras de un joven espectador.



En el escenario, los actores se colocan las máscaras frente al público y descubren la magia de la transformación de los personajes. La estética se complementa con muñecos articulados que dan pie a la construcción de dos realidades, que se funden e intercalan en una sola fantasía.



La puesta en escena suspendió sus actividades en 2019 a causa de la pandemia; ahora regresa al escenario. El confinamiento llevó a Alicia Martínez Álvarez a la reflexión sobre la nueva realidad del artista y del hecho escénico: “Estamos aprendiendo mucho, a pesar de que haya quien minimice o desprecie tal enseñanza. Estamos buscando nuevos paradigmas, maneras de no volver a una normalidad que dañó la vida.



“El dolor y la tristeza ante la pérdida de seres queridos son enseñanzas que golpean profundamente. Pero no debemos olvidar que la alegría es también una gran maestra y que la sabiduría del humor es también poderosa. Confío en que sabremos valorar esta experiencia y que podremos entender (como en Caballo blanco) que no somos la especie más inteligente”.



En la puesta en escena actúan Edgar Alonso (Caballo Blanco), Alberto Cerz (Niño), Martín Pérez (Abuelo) y Daniel Loyola (Caballerango). La música es de Anne Yvonne Durán, esculturas y escenografía de Patrick Pasquier; iluminación de Edgar Mora, vestuario de Natalia Janco, diseño de máscaras de Alicia Martínez Álvarez y realización de máscaras de Yadira Pérez y Patrick Pasquier, además de la asesoría musical de Griselda Ashari Martínez, asesoría vocal de Indira Pensado y asesoría en zapateado de Daniel Loyola y Martín Pérez.



Caballo blanco, escrita y dirigida por Alicia Martínez Álvarez, se escenificará del 6 al 28 de noviembre con funciones los sábados y domingos a las 13:00 horas, en el Teatro Sergio Magaña (Sor Juana Inés de la Cruz 114, colonia Santa María La Ribera, Metro San Cosme), respetando las disposiciones del semáforo epidemiológico vigente: uso permanente de cubre-bocas, gel anti-bacterial y registro de código QR por parte tanto del personal del teatro como de los espectadores.



Entrada general, 168 pesos. Aforo al 75% de la capacidad de público del Teatro. Los boletos se pueden adquirir en la taquilla del teatro y en las plataformas digitales de Ticketmaster.



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