El punk y el metal abanderan la Noche de Museos en el Museo Nacional de Culturas Populares



En el marco de la exposición “Poética de lo urbano. Punk y Metal en México”, exhibida hasta el mes de octubre en la Sala Cristina Payán
Presentaciones de libros en torno a estas dos expresiones musicales y una intervención poética musical formaron parte de las actividades nocturnas en el recinto museístico de Coyoacán



La Noche de Museos en el Museo Nacional de Culturas Populares tuvo preparada este miércoles 29 de agosto una tarde-noche dedicada al punk y al metal con presentaciones editoriales y una intervención poética-musical, las cuales acompañaron la exposición “Poética de lo urbano. Punk y Metal en México”, que continúa expuesta en la sala Cristina Payán de este recinto ubicado en el corazón de Coyoacán.



“Estas músicas son un signo de la resistencia de los jóvenes, pero sobre todo de su impulso para recrear nuevos lenguajes: verbales, corporales, en la indumentaria y en la construcción de símbolos, de sistemas de comunicación entre ellos”, comentó Jacinto Chacha Antele, titular de la Dirección General de Culturas, Populares, Indígenas y Urbanas de la Secretaría de Cultura, instancia que organiza dicha muestra.



En “Poética de lo urbano. Punk y Metal en México”, la historia de cientos los grupos que explotaron las sonoridades de estos dos géneros en los años ochenta y noventa en México, se manifiesta a través de fanzines, carteles, discos, casetes y objetos que se intercambiaban de mano en mano o por correspondencia antes de que el internet hiciera su aparición de manera masiva. “Esta exposición nos provee de un punto de vista histórico, para reflexionar cómo se han generado, retroalimentado y cambiado estas dinámicas musicales en distintas zonas urbanas del país”, expresó Chacha Antele.



Olivia Domínguez Prieto, curadora de esta muestra, dijo en entrevista que se busca reivindicar esa parte de las identidades socio-musicales que nacieron en algunas ciudades de nuestro país, como Tijuana, Ciudad Juárez, Guadalajara, Cuernavaca, la Ciudad de México y en algunos municipios como Ciudad Nezahualcóyotl en el Estado de México. Mostrar las dinámicas y los medios de comunicación -muchos de ellos autogestivos- antes del internet, que hicieron que se socializaran y perduraran los portadores de esta cultura que surge de las calles de la ciudad.



Estas dos manifestaciones musicales consideradas de contracultura, surgidas del rock de la década de los sesenta, llegaron casi clandestinamente a México en los años ochenta para construir una cultura popular que, con el paso del tiempo, ha trasladado a grupos musicales de espacios considerados underground a festivales internacionales con miles de asistentes.



Lo anterior fue abordado en el Patio Jacarandas de este recinto museístico, durante la presentación del libro “Cuerdas. Una historia punk”, de la escritora Verónica Miranda, con los comentarios de Carlos Maltés. En él, una chica punk narra sus experiencias en el entonces Distrito Federal, en una lucha a contracorriente de su entorno social.



Después, Olivia Domínguez Prieto presentó su libro “Transhumancias Musicales y Globalización. El metal no tiene fronteras”, en compañía de Benjamín Muratalla, Aída Analco y Óscar Clorio. La obra es una investigación basada en la etnografía urbana multisituada, en donde confluyen nuevos implementos tecnológicos y las expresiones e intercambios culturales en los que se trastocan los géneros, identidades y discursos musicales.



La noche concluyó con una intervención poético-musical en la que participaron Lorenzo Partida, poeta, bajista y principal compositor de la banda de thrash death metal “Transmetal”.



MAB