En el Museo del Estanquillo se presentó el libro El consultorio de la Doctora Ilustración (Ph. D.), de Carlos Monsiváis



● El libro rescata textos de la columna El consultorio de la Doctora Ilustración, un hilarante retrato de la cultura mexicana de la década de los setenta



● La presentación estuvo a cargo de Juan Guillermo López y Rafael Barajas El Fisgón, quien ilustró y prologó el libro de 240 páginas



Durante más de cuatro décadas, el escritor y periodista Carlos Monsiváis publicó la columna Por mi madre, bohemios, al principio en el suplemento La Cultura en México, de la revista Siempre!, y a partir de los años setenta decidió acompañar sus textos con una sección más hilarante: El consultorio de la Doctora Ilustración, en la que hipotéticos lectores pertenecientes al ámbito artístico y cultural escribían cartas en las cuales pedían el consejo de la doctora, que respondía siempre con locuaces y divertidas respuestas.



Con el apoyo de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México (SCCDMX), este fin de semana en el Museo del Estanquillo. Colecciones Carlos Monsiváis se presentó el libro El consultorio de la Doctora Ilustración (Ph. D.), trabajo de la editorial Malpaso que reúne una amplia selección de textos de Carlos Monsiváis, publicados en el suplemento La Cultura en México, de la revista Siempre!, durante la década de los setenta.



La presentación estuvo a cargo del investigador y traductor Juan Guillermo López, así como del caricaturista Rafael Barajas El Fisgón (quien prologó e ilustró el libro). Ambos coincidieron en destacar la vigencia del trabajo del cronista, así como la solvencia literaria —“siempre mordaz, inteligente y con sentido del humor”— que caracterizó al escritor.



Juan Guillermo López comentó que “el libro es el resultado de un proceso largo y minucioso”, y rememoró la forma como inició la columna de Monsiváis: “Inició en el suplemento La Cultura en México que coordinaba Fernando Benítez en el periódico Novedades, y fue por cuestiones políticas que le quitaron el espacio; José Pagés Llergo le abrió las páginas de la revista. Siempre!”



Ahí llegó Benítez —agregó Juan Guillermo López— e incorporó a un grupo de jóvenes intelectuales, como José Emilio Pacheco y Carlos Monsiváis, quienes le dieron un carácter muy específico al suplemento. Monsiváis inauguró una sección que duró muchísimos años, llamada Por mi madre, bohemios, donde lo que hacía era rescatar y comentar las declaraciones más absurdas de políticos, artistas y actores.



“En esa sección, Monsiváis tenía una subsección llamada El consultorio de la Doctora Ilustración… donde un pintor que no hallaba cómo hacerse famoso, el poeta que no encontraba inspiración o el político en desgracia, le escribían a la doctora y ella daba una respuesta brevísima de dos o tres líneas muy divertida y verdaderamente delirante”, dijo el presentador.



La recopilación de esos textos, aseguró, tiene la finalidad de “acercar a las nuevas generaciones al Carlos Monsiváis más joven, al Carlos de los años sesenta y setenta”, y mencionó que para el realizar el libro se tuvo que hacer una compilación de las cartas mediante un arduo trabajo de digitalización y transcripción que permitió seleccionar y editar las epístolas en 240 páginas.



Por su parte, Rafael Barajas El Fisgón mencionó que Monsiváis “es uno de esos autores a los que (sólo) se puede medir en retrospectiva y con mucho tiempo”, e hizo énfasis en los aportes del escritor a la vida pública nacional: “Carlos fue un periodista muy culto, fue un periodista muy eficaz y fue un periodista que marcó a su generación de muchas maneras, lo mismo que a su generación de lectores”



A manera de preámbulo, para entender el contexto sociocultural que modeló el pensamiento y obra de Monsiváis, el caricaturista hizo énfasis en el renacimiento mexicano postrevolucionario y los aspectos que marcaron y revitalizaron el aspecto cultural durante el siglo XX.



Llegaron –dijo El Fisgón-- pensadores políticos y artistas que le dieron un sesgo muy importante a la cultura mexicana, que pusieron en cuestión el dogma cultural del Estado mexicano, como Wolfgang Paalen, Leonora Carrington, Remedios Varo, hasta el mismo León Trotsky y Victor Serge. El acervo que aportaron empezó a cristalizar y a dar frutos en la década de los cincuenta y coincide con el auge del alemanismo, la Guerra Fría y con el macartismo en Estados Unidos.



Para el caricaturista, Carlos Monsiváis y su trabajo periodístico en Siempre! integra elementos propios de la crónica —“y una suerte de radioteatro”—, acompañado de una consignación de “humor involuntario” a través de un personaje ficticio, siempre dispuesto a ayudar a la “pasarela de la intelectualidad” de la época en temas de todo tipo.



Juan Guillermo López dedicó la compilación a la memoria del Carlos Monsiváis y a las nuevas generaciones: “Carlos debería estar aquí sentado con nosotros; él tendría que escribir un nuevo libro ahora, para el país que vamos a inaugurar; el Carlos joven y delirante es el que estamos tratando de acercar con este proyecto para que los jóvenes lectores realmente conozcan la figura de este Carlos Monsiváis”, finalizó.



El Museo del Estanquillo, perteneciente al sistema de recintos de la SCCDMX, se encuentra ubicado en Isabel la Católica 26, Centro Histórico. Para mayor información sobre las exposiciones, cursos y talleres del museo visite la página http://www.museodelestanquillo.cdmx.gob.mx/; abierto de miércoles a lunes de 10:00 a 18:00 horas, entrada libre.



La cartelera de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México está disponible en http://www.cultura.cdmx.gob.mx/ y en el sitio http://www.cartelera.cdmx.gob.mx; en redes sociales (Twitter y Facebook) @CulturaCDMX, siga el hashtag #CulturaCDMX.